Luego de superar al jugador galo en dos horas y 56 minutos, el número nueve del ranking mundial regresó a una fase de cuartos de final de un Grand Slam tras casi 20 meses, precisamente después del Roland Garros de 2015.
Con esta victoria, Nadal aumentó además sus aspiraciones de convertirse en el primer tenista de la Era Abierta en conquistar al menos dos veces los cuatro principales eventos del año.
'Empezar una temporada con cuartos de final en un Grand Slam y encima en cancha dura, que hacía un par de años que no lo conseguía, es muy importante para mí', comentó el ibérico a la prensa después del encuentro.
Nadal, quien parece reencontrar su mejor tenis tras un 2016 marcado por una lesión de la muñeca, buscará ahora en cuartos ante el canadiense Milos Raonic (3) avanzar a una semifinal de Grand Slam después de lograrlo por última vez en el Roland Garros de 2014.
Para el partido de este miércoles, el jugador español refirió que 'si no juego agresivo estoy muerto', toda vez que Raonic es uno de los mejores sacadores del mundo.
El jugador canadiense accedió a cuartos de final tras derrotar también esta jornada al español Roberto Bautista (13) por 7-6 (8/6), 3-6, 6-4 y 6-1.
Igualmente, avanzó a la siguiente ronda el búlgaro Grigor Dimitrov (15) al vencer por 2-6, 7-6 (7/2), 6-2 y 6-1 al uzbeko Denis Istomin, quien eliminó en segunda ronda del torneo al sublíder del ranking del orbe el serbio Novak Djokovic.
Luego de las eliminaciones de Djokovic (2) y el británico Andy Murray (1), Nadal aparece como uno de los principales candidatos para disputar el título del Abierto de Australia junto al suizo Roger Federer (17), quien mañana se medirá en cuartos ante el alemán Mischa Zverev, victimario de Murray.
De esta manera, el español pudiera conquistar su decimoquinto Grand Slam en su carrera deportiva y colocarse a dos del récord histórico en poder de Federer.