CAMBIO DE PERSONALIDAD

Con frecuencia se ha dicho respecto a A.A. que solamente estamos interesados en el alcoholismo. Eso no es cierto. Tenemos que dejar de beber para permanecer vivos. Pero cualquiera que conozca la personalidad del alcohólico por medio del trato personal sabe que ningún alcohólico verdadero deja de beber permanentemente a menos que sufra un profundo cambio de personalidad.

Creíamos que las "condiciones" nos impulsaban a beber, y cuando tratamos de corregir estas condiciones y nos encontramos con que no podíamos hacerlo a nuestra entera satisfacción, nuestra forma de beber se hizo incontrolable y nos volvimos alcohólicos.

Nunca se nos ocurrió pensar que teníamos que cambiar nosotros para hacer frente a las condiciones, cualesquiera que éstas fueran.

EN MANOS DE DIOS

Cuando miramos retrospectivamente, nos damos cuenta de que lo que recibimos cuando pusimos nuestras vidas al cuidado de Dios resulté mucho mejor que cualquiera cosa que hubiéramos podido planear.

Mi depresión se profundizó de manera inaguantable, y finalmente me pareció que me encontraba en el fondo del abismo. Por el momento, el último vestigio de mi orgullosa obstinación estaba aplastado. Repentinamente me encontré gritando: "¡Si hay un Dios, que se muestre ante mí! ¡Estoy dispuesto a hacer lo que sea, lo que sea!" Súbitamente el cuarto se iluminó con una gran luz blanca. Sentí que estaba en una montaña, y que el viento, compuesto no de aire sino de espíritu, estaba  soplando. Y entonces, inesperadamente, supe que era un hombre libre. El éxtasis desapareció lentamente. Yacía en la cama, pero ahora, por el momento, me encontraba en otro mundo, un nuevo mundo de Conciencia. A mi alrededor y a través de mí tenía una maravillosa sensación de una Presencia, y pensé:

 "¡De modo que este es el Dios que predican?".

DOLOR Y PROGRESO

Hace algunos años solía compadecer a toda la gente que sufría. Actualmente sólo compadezco a aquellos que sufren en la ignorancia y que no comprenden el objeto y utilidad esenciales del dolor.

 Alguna vez alguien hizo la observación de que el dolor es la piedra de toque del crecimiento espiritual. ¡Qué de corazón nosotros los AA's, estamos de acuerdo con esta indicación, por que sabemos que los dolores del alcoholismo tuvieron que llegar antes que la sobriedad, y los disturbios emocionales antes que la serenidad.

Hay que creer con mayor profundidad. Hay que levantar la cabeza hacia la luz, aunque

por el momento no se pueda ver.

¿PODEMOS ESCOGER?

Nunca debemos cegarnos por la fútil filosofía de que somos victimas de la herencia, de nuestras experiencias con la vida, de las circunstancias que nos rodean -que son estas las únicas fuerzas para decidirnos. Este no es el camino de la libertad. Debemos creer que podemos realmente escoger.

 Como alcohólicos activos, perdimos la capacidad de escoger si beberíamos o no. Eramos las víctimas de una compulsión que parecía determinar que teníamos que seguir adelante con nuestra destrucción.

No obstante, finalmente hicimos elecciones que lograron nuestra recuperación. Llegamos a creer que, solos, éramos impotentes ante el alcohol. Esta era realmente una elección, y una sumamente difícil de hacer. Llegamos a creer que un Poder Superior nos devolvería la cordura, y estuvimos dispuestos a practicar los 12 Pasos de A.A. En resumen, es cogimos el "estar dispuestos", y esa fue la mejor elección que pudimos haber hecho.

SOSTENIMIENTO Y CRECIMIENTO

Es evidente que una vida en la que hay resentimientos sólo conduce a la futileza y a la infelicidad. En el grado exacto que los permitimos, dilapidamos las horas que pudieron haber sido algo que valiera la pena. Pero con el alcohólico, cuya esperanza es el mantenimiento y el desarrollo de la experiencia espiritual, este asunto de los resentimientos es infinitamente grave. Nosotros nos dimos cuenta de que era fatal. Porque cuando estamos abrigando estos sentimientos nos cerramos a la luz del Espíritu. La locura del alcohol regresa y volvemos' beber; y para nosotros, beber es morir.

 Si íbamos a vivir, teníamos que estar libres de la ira. El descontento y los excesos violentos de locura temporal no eran para nosotros. Pueden ser el dudoso lujo de hombres normales, pero para los alcohólicos estas cosas son veneno.

¿TODO O NADA?

 La aceptación y la fe son capaces de producir un ciento por ciento de sobriedad. De hecho, generalmente lo logran; y así debe de ser, pues de otro modo no estaríamos ni siquiera vivos. Pero a partir del momento en que introducimos estas actitudes en nuestros problemas emocionales, encontramos que sólo es posible obtener resultados relativos. Nadie puede, por ejemplo, librarse completamente del miedo, la ira y el orgullo.

 Por tanto, en esta vida no obtendremos una perfecta humildad ni amor. De modo que tendremos que conformarnos, con relación a casi todos nuestros problemas, con un progreso gradual, muchas veces punteado por pesados retrocesos. Nuestra antigua actitud de "todo o nada" tendrá que ser abandonada.

LA REGION DEL ESPíRITU

Antiguamente, el progreso material era sumamente lento. El espíritu moderno de las pesquisas científicas, la investigación y la invención casi no se conocía. En la región de

lo material, las mentes de los hombres estaban encadenadas por su superstición, la tradición, y todo tipo de ideas fijas. A algunos de los contemporáneos de Colón se les figuraba que la idea de que la tierra fuese redonda era descabellada. Otros estuvieron a punto de ejecutar a Galileo por sus herejías astronómicas.

 ¿No somos algunos de nosotros tan irrazonables y mal predispuestos con respecto al terreno espiritual como lo fueron en la antigüedad con relación a lo material?

Nos dimos cuenta de que Dios no impone condiciones demasiado duras a aquellos que lo buscan. Para nosotros la región del espíritu es amplia, espaciosa, incluyente - nunca privativa o vedada para aquellos que fervorosamente la buscan. Pensamos que está abierta para todos los seres.

UNA NUEVA VIDA

¿Es la sobriedad todo lo que habremos de esperar de un despertar espiritual? No, la sobriedad es apenas un principio; es tan sólo el primer don del primer despeñar. Si han de recibirse más dones, nuestro despertar tiene que continuar. Conforme adelanta, encontramos que pedazo a pedazo podemos desechar la antigua vida -la que no dio resultado- por una nueva vida que sí sirve bajo cualquier condición que se suscite.

 No obstante el éxito o el fracaso mundanos, no obstante la pena o la alegría, no obstante la enfermedad o la salud -o aun la muerte- una nueva vida de interminables

posibilida- des puede ser vivida si estamos dispuestos a continuar nuestro despeñar por medio de la práctica de los Doce Pasos de A.A.

EL GRUPO Y LA AMPLIA COMUNIDAD MUNDIAL

 En el momento en que el trabajo de Paso Doce forma un grupo, se hace un descubrimiento - que la mayoría de los individuos no pueden recuperarse a menos de que haya un grupo. Cada miembro se da cuenta de que es tan solo una pequeña parte de un gran todo; que ningún sacrificio personal es demasiado grande para la preservación de la Fraternidad. Aprende que el clamor de los deseos y ambiciones que existen dentro de él deben silenciarse en el momento en que éstos pudiesen perjudicar al grupo.

 Se hace evidente que el grupo debe de sobrevivir, o el individuo no lo hará.

 El miembro solitario en el mar, en la guerra en tierras lejanas - todos estos miembros saben que pertenecen a la comenudad mundial de AA., que la suya es tan solo una separación física, que sus compañeros pueden estar tan cerca como el siguiente puerto a tocar. Es también muy importante el hecho de que están seguros de que la gracia de Dios está tanto con ellos en alta mar, como en una avanzada solitaria, como en su propio hogar.

FUERA DE LA OSCURIDAD

 El autoanálisis es el medio por el cual logranws que llegue a la parte oscura y negativa de nuestra naturaleza a nueva visión, acción y gracia. Con esto llega el desarrollo de da clase de humildad que hace que nos sea posible recibir la ayuda de Dios.

Pero es tan sólo un paso. Desearemos ir más adelante..

Desearemos que el bien que hay en todos nosotros, aún en los peores, florezca y crezca.

Pero antes que nada desearemos la luz; casi nada puede crecer en la oscuridad. La meditación es nuestro paso hacia la luz.

 Una luz clara parece descender sobre todos nosotros -cuando abrimos los ojos-. Como nuestra vagina es se da por nuestros propios defectos, primero debemos darnos cuenta a fondo de cuáles son ellos. La meditación constante es el primer requisito para cada nuevo paso hacia nuestro crecimiento espiritual.  
 
A.L.