Solo hasta que te sucede, solo hasta que lo vives en carne propia, actúas, y en verdad que me parece si no un tanto hipócrita un mucho ingenuo. Tal parecieran que fueran acciones humanitarias, pero esconden un sordo egoísmo audible solo para el genuino activista filántropo.
- No es hasta que tu hijo es secuestrado que te haces activista de la causa.
- No es hasta que tu hijo nace con síndrome de Down, que te haces activista de la causa.
- No es hasta que tu hijo sufre quemaduras graves, que te haces activista de la causa.
- No es hasta que tu hijo es asesinado, que te haces activista de la causa.
- No es hasta que tu hijo es violado, que te haces activista de la causa.
- No es hasta que tu hijo queda parapléjico que te haces activista de la causa.
- No esta que eres indocumentado, discriminado, prostituido,... que te haces activista de la causa.
- Y un largísimo "etc".
- ¿Entonces tenemos que esperar a perder o no tener de forma íntegra y digna algo que realmente nos importa para luchar a favor de ello?
- ¿Y si no pasara nos vale pura chingada si le ocurre a otros o no?
- ¿Lucho en verdad por la causa ajena o solo por mi causa y aliviar solo mi conciencia?
No esperes, como dijo Bob Marley: "La gente que está tratando de hacer este mundo peor, no toma ni un día libre, ¿cómo podría tomarlo yo? Ilumina la oscuridad".
W
BLOG: EDUCACIÓN Y POLÍTICA.