Página principal  |  Contacto  

Correo electrónico:

Contraseña:

Registrarse ahora!

¿Has olvidado tu contraseña?

FORO LIBREPENSADOR SIN CENSURA
 
Novedades
  Únete ahora
  Panel de mensajes 
  Galería de imágenes 
 Archivos y documentos 
 Encuestas y Test 
  Lista de Participantes
 GENERAL 
 REGLAS DE ESTE FORO LIBRE 
 Panel de quejas 
 CONCORDANCIAS BIBLICAS 
 PANEL DEL ADMINISTRADOR BARILOCHENSE 6999 
 
 
  Herramientas
 
General: NOMBRE SOBRE TODO NOMBRE PARA PADRE E HIJO
Elegir otro panel de mensajes
Tema anterior  Tema siguiente
Respuesta  Mensaje 1 de 7 en el tema 
De: GOYOBRITO  (Mensaje original) Enviado: 26/02/2017 12:01

PADRE CREADOR E HIJO CON UN NOMBRE SOBRE TODO NOMBRE:

    Desde tiempos remotos, se sabe de la existencia de un Dios Altísimo, Grande y Todopoderoso, a quien por ser el Creador de todas las cosas visibles e invisibles, se le atribuye la cualidad de Padre. Este Padre creó entre todas estas cosas, a los seres de luz, y a los primeros especimenes humanos; pero debido a la desobediencia humana que suscitó el querubín Lucero e hijo de la mañana, el Ser Divino se vio en la imperiosa obligación de permitir que Adán y Eva pudieran hacer la procreación de hijos, porque desgraciadamente habían de morir. Por esta procreación, le sobrevendrían a la mujer dolores de parto en cada alumbramiento. Y algo muy significativo de maldición, es la enemistad que el Padre Creador puso entre la simiente de la mujer y la simiente de la serpiente. Esta serpiente desde luego es el arquetipo de lucero (Lucifer), y en cambio la simiente bendita vendría a representar a Jesucristo.

Así que desde entonces había un misterio en cuanto a la simiente bendita versus la antigua serpiente, que vino a ser revelado al Patriarca Abraham y a varios de sus descendientes predilectos, como también se lo dio a conocer a Moisés, a los profetas y a los Apóstoles. Ha de considerarse que Jesucristo al ser engendrado por el Ser Divino y al venir de la simiente de la mujer, es su Hijo, por cuanto Él es el Padre de todo lo creado, pero en cumplimiento a dos profecías anunciadas mediante el Profeta Isaías, tenía que haber algo diferente entorno a Jesucristo, porque su Nombre se llamaría Padre Eterno y Dios Fuerte; y quien por el significado de Emmanuel, que quiere decir: “Dios con nosotros”, fue engendrado sobrenaturalmente, por el Espíritu Santo, es decir, por el mismísimo Padre Creador de todas las cosas, visibles e invisibles; para tener en su Hijo Unigénito (Único Hijo engendrado), su morada, y así habitar entre nosotros, hacerse presente y darnos a conocer su Nombre (Slm. 2:7; Heb. 1:5-6; Isaías 52:6). El cual lo prefijó en lugar del nombre Oseas hijo de Nun, y evidentemente es “IESUÉ”, que significa: Ío soy, El Salvador que a Ustedes me ha Enviado. Nombre este que por el ángel Gabriel, le fue revelado en sueños a José, esposo de Miriam “María” (Mt.1:21).

En lo concerniente a Jesucristo, es que su perfecta forma humana destinada al sufrimiento para la salvación de muchos en el mundo, vino a resultar no sólo en simiente de David al devenir de una de sus descendientes, sino que conforme a la carne es el Hijo del Padre Creador, porque fue quien lo engendró (Salm. 2:7-12; y Heb. 1:1-9; Ro. 9:5). Es un Hijo bastante Único en su categoría, y diferente a todos los demás hijos de Dios, ya que no fue procreado por el hombre, sino engendrado por el Espíritu Santo, que es el mismísimo Padre Creador (Slm. 2:7; Heb. 1:5-6). Por lo cual no contrajo la sabia del fruto prohibido que se transmitió desde Adán a todos los mortales, sino más bien, en su cuerpo se introdujo toda la plenitud de la Deidad, y su exaltada condición humana heredó un excelente Nombre por encima de todos (Col. 2:9; y Flp. 2:9-11).

Jesucristo aún de ser el Único engendrado sobrenaturalmente y el sustituto de Adán, es el Espíritu Vivificante; y es el que da la vida, como el mismo lo dijo: “Yo soy la resurrección y la vida, y el que cree en mí, aunque esté muerto vivirá”. Es sorprendente que Jesucristo aún de su humanidad, es el Espíritu Vivificador, del cual cada ser humano tiene el aliento de vida que al principio lo sopló sobre Adán, y este como producto de la procreación, lo transmitió a los demás seres humanos. Cristo además de ser Hijo de Dios, maravillosamente conforme al Espíritu es el mismísimo Dios y Padre, tal como así lo aseguran Isaías, Juan, Pablo y Pedro, veamos:

Porque un niño nos es nacido, hijo nos es dado, y el principado sobre su hombro; y se llamará su Nombre Admirable, Consejero, Dios Fuerte, Padre Eterno, Príncipe de Paz”. Isaías 9.6.

Si me conocieseis, también a mi Padre conoceríais; y desde ahora le conocéis, y le habéis visto. Felipe le dijo: Señor, muéstranos al Padre y nos basta. IESUÉ le dijo: ¿Tanto tiempo hace que estoy con ustedes y no me has conocido Felipe?, el que me ha visto a mí, ha visto al Padre: ¿Cómo, pues, dices tú: Muéstranos el Padre?” Juan 14.7-9.

“E indiscutiblemente, grande es el Misterio de la Piedad, Dios fue manifestado en carne, justificado en el Espíritu, Visto de los ángeles, predicado a los gentiles, creído en el mundo, recibido arriba en gloria” Timoteo. 3.16.

Pero sabemos que el Hijo de Dios ha venido, y nos ha dado entendimiento para conocer al que es verdadero; y estamos en el verdadero, en su Hijo Jesucristo. Este es el verdadero Dios, y la vida eterna” 1ª de Juan 5.20.

Aguardando la esperanza bienaventurada y la manifestación gloriosa de nuestro gran Dios y Salvador Jesucristo”. Timoteo 2.13.

“Simón Pedro, siervo y Apóstol de Jesucristo, a los que habéis alcanzado, por la justicia de nuestro Dios y Salvador Jesucristo, una fe igualmente preciosa que la nuestra” 2ª de Pedro 1.1.

Tomás era también uno de los discípulos del Divino Maestro, quien primero al dudar de la resurrección de Cristo, finalmente cuando se le apareció estando en compañía de los demás, se le arrodilló y exclamando le dijo: “¡Señor mío y Dios mío!” No solo esto se puede tomar en cuenta para saber que nuestro Dios Padre es Cristo, sino que en el cuerpo de este dijo el Apóstol Pablo, habita toda la plenitud de la Deidad; y en él estamos completos (1ª de Col. 2:9-10).

El Padre en el Hijo, vino a revertir las obras del Diablo, ya que si este a través de una mujer suscitó malignidades y muerte al ser humano, Dios al contrario mediante una mujer, a todos los del linaje de Adán y Eva, nos vino a traer en su forma de IESUE, El Cristo, la Salvación y la Vida Eterna. Por lo tanto que debiendo venir el Padre en su Hijo Unigénico con un Nombre sobremanera Poderoso, razones tuvo el profeta Agur, hijo de IAQUÉ, cuando en su quinta respuesta contenida en el versículo 4 del capitulo 30 del libro de Proverbios, preguntó: ¿Cuál es su Nombre, y el Nombre de su Hijo, si sabes? Indudablemente se estaba refiriendo al Nombre del Padre Eterno y el de un Hijo extraordinario, acerca del cual inquirió respuesta, de quien se la pudiera contestar si lo sabía. Esta respuesta está ampliamente contestada, por cuanto en el 700-690 a.C., el mismísimo Dios en su forma de Espíritu, y luego en el año 36 de la Era Cristiana en su forma de siervo respectivamente expresó:     

“Por tanto, mi pueblo sabrá mi Nombre por esta causa en aquel día; porque yo mismo que hablo, he aquí estaré presente ¡Cuan hermosos son sobre los montes los pies del que trae alegres nuevas, del que anuncia la paz, del que trae nuevas del bien, del que publica salvación, del que dice a Sión: ¡Tú Dios reina!” Isaías 52.6-7

Yo he venido en Nombre de mi Padre, y no me recibís; si otro viniere en su propio nombre, a ese recibiréis”. Juan 5.43.

“Padre, glorifica tu Nombre. Entonces vino una voz del cielo: Lo he glorificado, y lo glorificaré otra vez”. Juan 12.28.

“Y todo lo que pediréis al Padre en mi Nombre, lo haré, para que el Padre sea glorificado en el Hijo. Si algo pidiereis en mi Nombre, yo lo haré”. Juan 14.13.

“Para que todo lo que pediréis al padre en mi Nombre, él os lo de”. Juan 15.16.

“En aquel día no me preguntareis nada. De cierto, de cierto, de cierto os digo, que todo cuanto pediréis al Padre en mi Nombre, os lo dará” Juan 16.23.

“Otra vez os digo, que si dos de vosotros se pusieren de acuerdo en la tierra acerca de cualquier cosa que pidiereis, les será hecho por mi Padre que está en lo cielos. Porque donde están dos o tres congregados en mi Nombre, allí estoy yo en medio de ellos”. Mateo 18.19-20

“Padre Santo, guárdalos en tu Nombre, para que sean uno, así como nosotros somos uno”. Juan 17.11.

Y les he dado a conocer tu Nombre, y lo daré a conocer aún, para que el amor con que me has amado esté en ellos, y yo en ellos”. Juan 17.26.

Efectivamente, el Nombre que Cristo dio a conocer y lo daría a conocer aún con respecto de su Padre e Hijo, es su propio Nombre IESUÉ. Es por esto, que todo lo relativo a la salvación, arrepentimiento, bautismo, perdón de pecados, potestad de ser hechos hijo de Dios, poder y vida eterna, es en el Nombre de IESUÉ, El Cristo. Así que ha de entenderse, lo que mediante las Escrituras, a seguida se comenta:

“A los que creen en su Nombre, le dio potestad de ser hechos hijos de Dios”. Juan 1.12.

“Y cualquiera que haya dejado casas, o hermanos, o hermanas, o padre, o madre, o mujer, o hijos, o tierras por mi Nombre, recibirá cien veces más, y heredará la vida eterna”. Mateo 19.29.

“Id ustedes y haced discípulos de todas las naciones en mi nombre, en soñándoles a guardar todas las cosas que yo les he mandado” (Mt. 28.19-20, Evang. Hebreo Shem Tov, 1385).

Así está escrito y así fue necesario, que el Cristo padeciese y resucitase de los muertos al tercer día; y que se predicase en su Nombre, el arrepentimiento y perdón de pecados en todas las naciones, comenzando desde Jerusalén”. Lucas 24.46-47.

“Pedro les dijo: Arrepentíos y bautícese cada uno de vosotros en el Nombre de Jesucristo para perdón de los pecados; y recibiréis el don del Espíritu Santo”. Hechos 2.38.

Oyó el rey Herodes la fama de IESUÉ; porque su Nombre se había hecho notorio, y dijo: Juan el Bautista ha resucitado de los muertos, y por eso actúan en el esos poderes”. Marcos 6.14.

Juan le respondió diciendo: Maestro, hemos visto a uno que en tu Nombre echaba fuera demonios, pero él no nos sigue, y se lo prohibimos, porque no nos seguía. Pero IESUÉ dijo. No se los prohibáis; porque ninguno hay que haga milagros en mi nombre, que luego pueda decir mal de mí” (Lc. 9.49).

“Y en ningún otro hay salvación; porque no hay otro Nombre bajo el cielo, dado a los hombres, en que podamos ser salvos” Hechos 4.12.

 “De este dan testimonio todos los profetas, que todos los que en el creyeren, recibirán perdón de pecados por su Nombre”. Hechos 10.43.

Por todas esas revelaciones en cuanto al Ser Divino como Padre e Hijo, es sorprendente saber que en la unión perfecta de su forma Humana con su Poderoso Espíritu, tiene un Nombre sobre todo Nombre, que es la clave mediante se tienen que hacer todas las cosas, tal como Pablo inspirado por el Espíritu del Señor escribió: “Y todo lo que hacéis, sea de hecho o de palabra, hacedlo todo en el Nombre del Señor IESUÉ, dando gracias al Padre por medio de él” (Col. 3.17). Y ya para culminar, Juan también en cuanto a ese Nombre, nos dejó el siguiente dato importante:

“Después miré, y he aquí el Cordero estaba en pie sobre el monte de Sión, y con él ciento cuarenta y cuatro mil, que tenían el Nombre de él y el de su Padre, escrito en la frente”. Apocalipsis 14:1.



Primer  Anterior  2 a 7 de 7  Siguiente   Último  
Respuesta  Mensaje 2 de 7 en el tema 
De: Porque77 Enviado: 26/02/2017 12:55
...
Muy bien dicho, GOYOBRITO.


De: cpllpr  
Felipe tenía un problema de incredulidad,lo que Jesús le dice,es que él(Jesús) les estaba hablando de su padre,
por eso dice Jesús,que habiéndole visto a él,ya habían visto a Dios........

Porque77,pero no me seas ignorante,"el camino",es Jesús,Jesús es el camino hacia Dios,
el camino no es Dios,como tú dices


Jesucristo no solamente es el camino.  También es la verdad, y también es la vida.   Entonces, Jesucristo es Dios, porque la vida solamente es Dios.  Anda, lee y aprende:

"Yo soy el camino, y la verdad, y la vida"..............
 
Como ves, Jesucristo es la vida. Y la vida es Dios...  Y como puedes ver, también Jesucristo es la verdad. Jesucristo nos trajo la verdadera Ley de Dios que el mundo ya no conocía porque los escribas judíos habían cambiado la Ley en mentira.  Y la verdadera Ley de Dios así nos dice:
 
 "todas las cosas que queráis que los hombres hagan con vosotros, así también haced vosotros con ellos; porque ésta es la ley y los profetas". (Mateo 7:12)

Jesús también enseña los verdaderos mandamientos de la Ley de Dios que debemos guardar para entrar en la vida y que así nos dicen:

"Mas si quieres entrar en la vida, guarda los mandamientos. Le dijo: ¿Cuáles? Y Jesús dijo: No matarás. No adulterarás. No hurtarás. No dirás falso testimonio. Honra a tu padre y a tu madre; y, Amarás a tu prójimo como a ti mismo. El joven le dijo: Todo esto lo he guardado desde mi juventud. ¿Qué más me falta? Jesús le dijo: Si quieres ser perfecto, anda, vende lo que tienes, y dalo a los pobres, y tendrás tesoro en el cielo; y ven y sígueme. Oyendo el joven esta palabra, se fue triste, porque tenía muchas posesiones. Entonces Jesús dijo a sus discípulos: De cierto os digo, que difícilmente entrará un rico en el reino de los cielos. Otra vez os digo, que es más fácil pasar un camello por el ojo de una aguja, que entrar un rico en el reino de Dios" (Mateo 19:16-24)

A los hombres codiciosos que se hacen dueños de muchas posesiones les cuesta muchísimo respetar la vida de Los indefensos (NO MATARÁS), y también les cuesta muchísimo entregar sus bienes a los pobres. Ellos no quieren el camino de la misericordia y prefieren imponer penas de muerte, sacrificios, esclavitud y "FALSAS RELIGIONES" a los pobres.

Por eso, Jesucristo también les dijo a aquellos judíos y a las falsas religiones que aparecerían despees de Él:

"... si supieseis qué significa: Misericordia quiero, y no sacrificio, no condenaríais a los inocentes" (Mateo 12:7


"Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente. Este es el primero y grande mandamiento. Y el segundo es semejante: Amarás a tu prójimo como a ti mismo". (Mateo 22:34-40)

El Señor no mandó que se mate a las personas que cometen faltas, sino que se les perdone, pues el Evangelio así nos dice:

"Entonces se le acercó Pedro y le dijo: Señor, ¿cuántas veces perdonaré a mi hermano que peque contra mí? ¿Hasta siete? Jesús le dijo: No te digo hasta siete, sino aun hasta setenta veces siete". (Mateo18:21-22)

"Porque si perdonáis a los hombres sus ofensas, os perdonará también a vosotros vuestro Padre celestial; mas si no perdonáis a los hombres sus ofensas, tampoco vuestro Padre os perdonará vuestras ofensas". (Mateo 6:14)

 

Respuesta  Mensaje 3 de 7 en el tema 
De: GOYOBRITO Enviado: 26/02/2017 17:24

Respuesta  Mensaje 4 de 7 en el tema 
De: cpllpr Enviado: 26/02/2017 21:14
Porque77,no solamente no reconoces tú error,sino que me dices que aprenda y lea,
¿qué aprenda y lea,qué?,¿qué Jesús es el camino hacia sí mismo?,
¿qué Dios es el camino hacía sí mismo?.

Respuesta  Mensaje 5 de 7 en el tema 
De: GOYOBRITO Enviado: 27/02/2017 10:18
Cpllpr tu estás mas enredado que un papagayo
Cristo es según la carne y conforme al Espíritu es Dios sobre todas las cosas y punto
(Ro. 9:5; Jn. 1:1,14; 14:7-11; 1 Tmt. 3:16; 1 Jn. 5.20; Col. 2:9-10)

Respuesta  Mensaje 6 de 7 en el tema 
De: cpllpr Enviado: 27/02/2017 15:23
En Romanos 9:5,Pablo llama a Jesús Dios,porque Dios le dio ese nombre:

Por lo cual Dios le exaltó y le otorgó el Nombre, que está sobre todo nombre. 
(Flp 2:9 Jer 2001*)

Porque una criatura nos ha nacido, un hijo se nos ha dado. Estará el señorío sobre su hombro, y se llamará su nombre "Maravilla de Consejero", "Dios Fuerte", "Siempre Padre", "Príncipe de Paz". 
(Isa 9:5 Jer 2001*)

Observa como en el pasaje anterior,se dice,que a Jesús se LE LLAMARA,
¿y quién es el que le da esos nombres?,pues su padre,tal y como lo vierte Filipenses 2:9,
el resto de pasajes que citas,ya te los he explicado 80 veces,algunos,en mi comentario precedente.

Respuesta  Mensaje 7 de 7 en el tema 
De: GOYOBRITO Enviado: 27/02/2017 15:50
 
Cpllpr tu estás mas enredado que un papagayo
Cristo es según la carne y conforme al Espíritu es Dios sobre todas las cosas y punto
(Ro. 9:5; Jn. 1:1,14; 14:7-11; 1 Tmt. 3:16; 1 Jn. 5.20; Col. 2:9-10)


Primer  Anterior  2 a 7 de 7  Siguiente   Último  
Tema anterior  Tema siguiente
 
©2024 - Gabitos - Todos los derechos reservados