22 de Julio de 1947: Eva Perón es condecorada en Francia con la "Legión de Honor"
Evita al momento de recibir la condecoración de la "Legión de Honor" de parte del canciller francés Georges Bidault.
El 16 de julio de 1947 el periódico francés Le Monde publicaba en tapa que la embajada argentina había anunciado la llegada a París de madame Perón, programada para el 21 de julio de entonces.
La cita en París formaba parte de la agenda diplomática que la “gira del arcoiris” planteaba desde su inicio en febrero de 1947, cuando María Eva Duarte de Perón pisó el viejo continente llegando a la España franquista.
Al elenco de países a visitar se sumaron además Portugal, Mónaco, Italia comprendiendo el Vaticano y Suiza. En un plano de reconstrucción mundial, Evita con tan solo 28 años llevó adelante negociaciones y acuerdos internacionales que posicionaron a la Argentina en un rol clave del tablero geopolítico de la posguerra.
En su llegada a París fue recibida por el entonces ministro de Exteriores Georges Bidault y una delegación de mujeres y niños que esperaron a la salida del aeropuerto aplaudiendo entre banderas argentinas y francesas. París puso para uso de la primera dama argentina el auto del general Charles De Gaulle, gesto que sólo tuvo un antecedente y fue ni más ni menos que para una visita oficial del ex primer ministro británico Winston Churchill.
El 26 de Julio 1952, Eva María Duarte de Perón, a sus 33 años dejaba este mundo.
Desde SUTEP rendimos homenaje al recordarse un aniversario mas de su partida.
Las trabajadoras y trabajadores del Espectáculo Público recordamos a Evita, con mucho respeto, cariño, admiración y gratitud, por su dedicación y esfuerzo en la defensa del pueblo, de los obreros, de las mujeres y de los niños.
Compartimos la “BIOGRAFIA DE EVA DUARTE DE PERON (1919 – 1952) «EVITA» – RESEÑA HISTÓRICA DE LA VIDA DE EVITA”.
Quinta hija de Juana Ibarguren y Juan Duarte, nace el 7 de Mayo de 1919 en los Toldos, provincia de Buenos Aires; transcurren allí los primeros años de su infancia. En 1926, fallece su padre. En 1930, la familia se traslada a Junín. Comienza a despuntar su vocación por la declamación y el teatro. En octubre de 1934, Evita viaja a Buenos Aires acompañada por su madre para pasar una prueba en Radio Cultura.
En ese mismo año fija su residencia en Buenos Aires, consagrándose a la carrera artística. Integra las compañías teatrales de los más importantes directores teatrales de la época. A lo largo de diez años (1934 – 1944) se afirma frente a los micrófonos de las radios de mayor audiencia. En 1944 es elegida Presidenta de la Agrupación Radial Argentina.
Tras cuatro apariciones menores en el ámbito cinematográfico logra un papel más importante en » La Cabalgata del circo» (1944) y, en 1945, el rol protagónico en «La Pródiga».
El 15 de Enero de 1944 un violento terremoto destruye la ciudad de San Juan, y Juan Domingo Perón, a cargo de la Secretaría de Trabajo y Previsión, solicita la colaboración de la ciudadanía para acudir en socorro de las víctimas. Los artistas, entre los que se encontraba Eva Duarte, participan activamente de la colecta nacional y organizan un festival artístico en el Luna Park. En esas circunstancias, el entonces coronel y la joven actriz comienzan una relación.
A la par que desarrolla sus actividades profesionales, Eva ingresa junto a Perón en el mundo de la política. Los históricos sucesos del 17 de octubre de 1945 marcarán el fin de su carrera artística. El 22 de ese mes, Juan Domingo Perón y María Eva Duarte contraen matrimonio civil en Junín y el 10 de diciembre la unión es consagrada en la iglesia de San Francisco, en La Plata.
En los comicios del 24 de febrero de 1946, la fórmula encabezada por el general Perón se impone con el 52,4% de los votos, y el 4 de Junio, éste asume la Presidencia de la Nación. Eva, esposa del Presidente define su propio rol: como Primera Dama será Eva Perón, y en su trabajo cotidiano con los humildes, los trabajadores y las mujeres, será Evita.
El 6 de Junio de 1947, Eva Perón inicia una gira oficial de casi tres meses de duración, visitando España, Italia, Portugal, Francia, Suiza, Mónaco, Brasil y Uruguay. Allí donde fuere, el programa de visitas y recepciones se verá siempre jalonado por las recorridas de los barrios obreros y las obras sociales. A la vez que ofrece donativos para las víctimas de un continente devastado por la guerra, busca «la lección europea» en materia de acción social. El 23 de agosto de 1947 regresa a Buenos Aires, retomando sus actividades a pleno. Emprende de inmediato la campaña de obtención del sufragio femenino a través de la radio y la prensa, trabajando con los legisladores, las delegaciones que la visitan y las mujeres nucleadas en centros cívicos. El 23 de Septiembre de 1947 es promulgada la ley 13.010 que otorga los derechos políticos a las mujeres argentinas.
El 19 de Junio de 1948 se construye formalmente la Fundación de Ayuda Social María Eva Duarte de Perón, dando estructura orgánica a la labor que Evita venía desarrollando desde 1946. Nacida con el objeto de «satisfacer las necesidades esenciales para una vida digna de las clases sociales menos favorecidas», su acción se concreta en la creación de Hogares Escuelas, Hogares de Ancianos, Hogares de Tránsito, el Hogar de la Empleada «General San Martín», las Ciudades Infantil y Estudiantil, la Escuela de Enfermeras, el Tren Sanitario, las Proveedurías y Plan Agrario, así como en la organización de los Campeonatos Infantiles y Estudiantiles. La Fundación desarrollará un gigantesco programa de construcción: viviendas obreras, edificios escolares -a través del plan 1000 Escuelas, colonias de vacaciones y centros sanitarios y policlínicos. A todo ello se sumará la ayuda social directa, mediante la cual Evita resolvía personalmente problemas de vivienda, salud o empleo, y la ayuda solidaria a los países extranjeros en situación de necesidad o catástrofe.
El 28 de Agosto de 1948 Eva Perón da lectura, en el Ministerio de Trabajo, a la Declaración de los Derechos de la Ancianidad, promulgado dos días antes y posteriormente incluidos en la Constitución de 1949. El 26 de Julio de 1949 se lleva a cabo en el Teatro Nacional Cervantes la Primera Asamblea Nacional del movimiento peronista femenino. Nace allí el Partido Peronista Femenino, y Eva es elegida Presidenta.
El 4 de Abril de 1951 Evita lee por primera vez los originales de «La razón de mi vida» El libro es lanzado a la venta el 15 de octubre del mismo año.
El 22 de agosto de 1951, en una multitudinaria concentración realizada en la Avenida 9 de Julio de la ciudad de Buenos Aires – Cabildo Abierto del Justicialismo-, la C.G.T. y el Partido Peronista Femenino proclaman su adhesión a la fórmula Perón–Eva Perón para las elecciones. Pocos días después, el 31 de agosto, Evita anuncia por cadena nacional de radiodifusión «su decisión irrevocable y definitiva de renunciar al honor con que los trabajadores y el pueblo» quisieron honrarla. El 11 de noviembre de 1951 la fórmula Perón – Quijano se impone con el 62,49% de los votos, influyendo notoriamente en este resultado el nuevo sufragio femenino.
Eva, gravemente enferma, es internada y operada pocos días antes en el Policlínico Presidente Perón de Avellaneda, donde vota por primera y única vez. El 14 de noviembre de 1951, abandona el hospital. A pesar de sus esfuerzos por retomar la actividad, el deterioro progresivo de su salud impone un freno a su tarea.
El 4 de Junio de 1952 Eva Perón acompaña al Presidente en los actos de asunción de su nuevo mandato. Es su última aparición en público. Tras una penosa agonía, el 26 de Julio de 1952 fallece a los treinta y tres años en la Residencia Presidencial, en Buenos Aires.
El llanto se lanzó a la calle, se mostró al mundo en interminables filas y acompañó el velatorio, que duró hasta el 11 de agosto. En esos 14 días, Argentina y los países limítrofes se quedaron sin flores. Más de dos millones de personas estuvieron presentes para darle el último adiós. La cureña con su féretro fue trasladado por obreros de la CGT, en una procesión cuyas imágenes en blanco y negro siguen impactando por el dolor, por la cantidad de gente, por la historia que contienen…
Porque esa mujer, que al morir pesaba 34 kilos, que dejaba de ser una realidad para comenzar a tomar forma de mito, fue una mujer controvertida: amada por unos, que la percibían casi como una santa, y odiada hasta el delirio por quienes se habían sentido afectados por su accionar y la consideraban ambiciosa y sin escrúpulos.
Quedaba aún su viaje final, el calvario que recorrió su cadáver embalsamado, que de los honores recibidos en el funeral, propios de un jefe de Estado aunque Evita nunca tuvo cargo oficial alguno, pasó a ser albergado en la central obrera hasta 1955, cuando al caer derrocado Perón, fue secuestrado por la dictadura militar de entonces. A partir de allí, el ataúd recorrió la ciudad en una camioneta por más de un año; sin embargo, «misteriosamente», siempre aparecían flores y velas en los lugares donde la estacionaban…
Su cuerpo fue mutilado y profanado y finalmente enviado clandestinamente a Italia. Estuvo enterrada, bajo un nombre falso, María Maggi de Magistris, durante 14 años, en el cementerio Maggiore, de Milán.
En 1971, el cuerpo le fue devuelto a Juan Domingo Perón en Madrid, que lo tuvo en su residencia. Llegó a la Argentina en 1974 y durante dos años permaneció en la Quinta presidencial. Finalmente, desde 1976, descansa en paz en la tumba familiar, en Recoleta.
Cien años de Eva Perón, emblema de la lucha por los derechos sociales en Argentina
La esposa del expresidente Juan Domingo Perón fue una líder carismática para los sectores más vulnerables y la abanderada de conquistas para las mujeres, como el voto femenino. Su presencia despertó amores y odios en el país.
Primera modificación: 07/05/2019 - 22:23Última modificación: 07/05/2019 - 22:31
Retrato de Eva Perón, tomado en 1951 en Buenos Aires, Argentina.AFP
Eva Duarte tuvo una corta vida. Con solo 33 años, un cáncer de útero apagó la vida de una mujer caracterizada por su fortaleza y su determinación. Pero en su breve trayecto, se convirtió en un ícono de la política argentina, a la cual se insertó de lleno tras conocer a Juan Domingo Perón, a la postre presidente de Argentina en tres períodos.
Su popularidad entre los sectores más vulnerables de la sociedad argentina quizás se debió a que su camino a la cima del poder político se construyó desde orígenes humildes.
Eva Duarte nació el 7 de mayo de 1919 y fue la quinta hija de la relación extramatrimonial entre su padre, Juan Duarte, y Juana Ibarguren. Su lugar de nacimiento no está del todo claro, aunque se estima que fue en Los Toldos, una localidad rural a 300 kilómetros de Buenos Aires. Siete años después del nacimiento de Eva, Juan Duarte falleció sin haber reconocido a sus hijos y dejando a la familia con serias dificultades.
A los 15 años, Eva Duarte –o 'Evita', como ha sido inmortalizada- decidió viajar a Buenos Aires para emprender su carrera como actriz. Un camino errante que la llevó por un puñado de películas, algunas portadas de revistas y la incursión en el mundo del radioteatro.
Pero el vuelco en su vida se dio el 22 de enero de 1944. Ese día, en un acto a beneficio de las víctimas del terremoto de San Juan (el cual dejó alrededor de 9.000 muertos en esa provincia del oeste del país) conoció a Juan Domingo Perón, por entonces secretario de Trabajo y Previsión y de creciente popularidad entre los sectores populares, que le reconocían sus conquistas en el terreno social.
Retrato de juventud de Juan Domingo Perón y Eva DuarteAFP
Tras casarse con Perón el 22 de octubre de 1945 –apenas unos días después de un breve arresto del general y su posterior liberación bajo aclamación popular-, acompañó a su esposo en su camino a la Presidencia y se convirtió en una de las primeras mujeres en hacer campaña política en Argentina y en liderar actos masivos.
Seis años de una maratónica carrera política con el eje en la tarea social
A partir de la llegada de Perón a la Presidencia en 1946, Evita inició una maratónica carrera política que catapultó su popularidad entre los sectores populares y despertó el rechazo en las clases altas de la sociedad argentina.
En el inicio de la presidencia de Juan Domingo Perón, Eva ejerció como embajadora de buena voluntad y recorrió distintos países europeos para tomar nota de diferentes medidas para mejorar la situación de los trabajadores y los sectores humildes. Posteriormente, luego de recorrer el país y evidenciar las necesidades, decidió centralizar la asistencia social a través de la Fundación que llevó su nombre.
El ministro de Exteriores francés, Georges Bidault, recibe a Eva Perón el 21 de julio de 1947 en París durante su visita a Francia.Pigiste AFP
La creación de esa institución también pudo responder a la negativa de la Sociedad de Beneficencia de Buenos Aires –liderada por mujeres de la oligarquía argentina- de darle la presidencia honoraria a Eva Perón en su condición de "primera dama", como tradicionalmente ocurría. Las autoridades de esa entidad adujeron que Eva Perón era muy joven y carecía de la formación necesaria para hacerse cargo de la institución, que por entonces encaraba la tarea de subvencionar a otras entidades de ayuda. Poco tiempo después, el ente fue intervenido por el gobierno de Perón y desapareció en 1947.
La labor de la Fundación Eva Perón permitió ampliar la cobertura previsional construir escuelas, ciudades universitarias, viviendas, hospitales, hogares para ancianos, madres solteras, organizar campañas de vacunación y promocionar el deporte, entre otras tareas.
En 1949 fundó el Partido Peronista Femenino, que canalizó la militancia de las mujeres y lideró la campaña para instaurar el voto femenino a nivel nacional a partir de las elecciones generales de 1951.
La doctrina de la denominada "abanderada de los humildes" se volcó en las páginas de sus libros 'La razón de mi vida' (publicado en 1951) y 'Mi mensaje' (1952). Su figura se hizo omnipresente en los noticieros cinematográficos semanales 'Sucesos argentinos', de proyección obligatoria en los cines del país, y hasta en los libros de educación primaria, que recogían la expresión “Evita me ama” para enseñar a deletrear y leer a los niños.
Su carisma y su acción social la convirtieron en un ícono, que también se caracterizó por su peinado y sus vestidos de marcas de alta costura, como Christian Dior, situación que, para sus críticos, denotaba cierta contradicción con su discurso de carácter popular.
El 'renunciamiento' a la Vicepresidencia y la batalla perdida contra el cáncer
En enero de 1950, Eva Perón fue operada de una apendicitis y allí fueron detectados los primeros síntomas de su cáncer de útero, que fue debilitándola progresivamente.
Ya diagnosticada con esa enfermedad, en 1951, el movimiento obrero propuso a Evita como candidata a la Vicepresidencia en la fórmula con Juan Domingo Perón, opción que fue rechazada por los sectores universitarios, los grandes conglomerados rurales e industriales, la Iglesia católica, las Fuerzas Armadas y los principales partidos políticos de oposición.
Eva Perón vota desde la cama de hospital en las primeras elecciones nacionales que permitieron el voto femenino el 11 de noviembre de 1951.Intercontinentale, AFP
La presión social y su precaria situación de salud llevaron a Evita a desestimar su candidatura en un icónico acto el 31 de agosto de 1951 –fecha conocida como el 'Día del Renunciamiento'-, contrariando por primera vez los deseos del movimiento obrero en una jornada que culminó con la explosión de una bomba en las instalaciones de la casa donde estaba expuesto su libro.
Finalmente, luego de un largo tratamiento médico y una operación quirúrgica que la llevó a votar por primera vez desde la cama del hospital en 1951, Eva Duarte de Perón murió el 26 de julio de 1952.
Su fallecimiento dejó a la luz la división que generaba su figura: mientras millones lloraron su partida, otros la celebraron y llegaron a pintar la expresión 'viva el cáncer'. Su muerte marcó el principio del fin del gobierno de Perón, que fue derrocado por una dictadura en 1955.
Alrededor de un millón de personas rindieron tributo a Eva Perón durante su funeral de estado en Buenos Aires, el 1° de agosto de 1952.AFP
Impulsados por el sentimiento antiperonista, los militares robaron el cadáver embalsamado de Evita y lo llevaron a un cementerio de Italia, hasta que fue devuelto en los años 70 a su viudo y, desde 1976, reposa en el cementerio de la Recoleta, en Buenos Aires.
Eva Perón sigue siendo hoy un ícono del Partido Justicialista y un símbolo que marcó una época de la historia argentina.
“…El 21 de julio, Evita descendió de su avión en Orly, vestida de blanco, con un sombrero de paja del mismo color, sonriente y un poco pálida. A los pies de la escalerilla, el ministro de Relaciones Exteriores, Georges Bidault, le besó la mano y luego la saludaron el embajador argentino en París, Julio Victorica Roca, y varios embajadores latinoamericanos. Un cortejo de cuarenta coches la acompañó hasta el Hotel Ritz, donde un grupo de niños le presentó un ramo de flores y Bidault se despidió. Como símbolo de la importancia que el gobierno francés daba a su persona, puso a su disposición el auto que había pertenecido al general Charles de Gaulle, el mismo que usaba sir Winston Churchill en sus visitas oficiales a París. Además, durante la estadía la Argentina y Francia firmaron un tratado comercial por el cual este país recibiría un abultado crédito para la compra de trigo y carne. La ceremonia tuvo lugar en el Quai D’Orsay, y finalizada la misma, Bidault condecoró a Evita con la Legión de Honor. Al día siguiente de su llegada, Evita fue recibida por el presidente Vincent Auriol en el castillo de Rambouillet, donde le ofreció un almuerzo…” (Evita. Marysa Navarro)
VIDEO Evita llega a Francia Eva Perón arriba al aeropuerto de Orly y es recibida por el Canciller Georges Bidault. Duración 1 minuto https://www.youtube.com/watch?v=T7NjQBNsCWc
VIDEO Evita en Francia. Eva Perón visita el castillo de Rambouillet, en Francia para almorzar con el presidente Vincent Autiol. Duración 3 minutos https://www.youtube.com/watch?v=jSzwYgMeSuU
VIDEO | 22 de Julio de 1947: Evita es recibida por Vicent Auriol, el presidente de Francia
Tuvo una agenda bastante apretada, con importantes reuniones para firmar acuerdos internacionales.
La “Gira del Arco Iris” de Evita por Europa y Sudamérica se realizó con el objetivo de fortalecer relaciones en el exterior, en un contexto de post Segunda Guerra Mundial. La primera dama fue enviada por Juan Domingo Perón para representar al gobierno peronista y al país. En primer lugar, llegó a España, donde se entrevistó con el general Francisco Franco y miles de españoles se rindieron a sus pies. Después se instaló en Italia, Portugal, Francia, Suiza, Mónaco, el Vaticano, Brasil y Uruguay.
El 22 de julio de 1947, la “abanderada de los humildes” llegó a Paris. Fue recibida por Georges Bidault, ministro de Exteriores francés. Además, la esperaba un grupo de mujeres y de niños que se mezclaban con las banderas de Argentina y de Francia. Las autoridades de la capital del país galo pusieron a disposición de Eva el automóvil del general Charles De Gaulle, un honor que hasta el momento sólo se había reservado para el primer ministro británico Winston Churchill. Con ese rodado, la oriunda de Los Toldos conoció la catedral de Notre Dame.
Evita ingresó a Notre Dame y se entrevistó con el monseñor Roncalli, quien en 1958 se convertiría en Papa y recibiría la denominación de Juan XXIII. Fuentes cercanas a la primera dama, sostienen que durante la entrevista que tuvieron, la joven argentina de 27 años le explicó la idea de realizar una fundación de ayuda social (la cual crearía al regresar al país) y recibió como respuesta: “Le recomiendo dos cosas: que prescinda por completo de todo papelerío burocrático, y que se consagre sin límites a su tarea”. Ambas las cumplió con excelencia.
Durante el tiempo en Francia, Evita estuvo hospedada en el Hotel Ritz. Tuvo una agenda bastante cargada de reuniones para firmar acuerdos internacionales. Uno de ellos fue con el presidente Vincent Auriol, con quien firmó un tratado que incluía el intercambio en particular de cuero, carne, cereales, aceites, y quebracho a cambio de acero, automóviles, diversos productos mecánicos, y en particular máquinas textiles, productos químicos.
“En su entrevista con el ministro de Relaciones Exteriores, Georges Bidault, uno de los principales dirigentes de la resistencia interior a la ocupación alemana, Evita le planteó que era muy desagradable que Francia, país amigo de la Argentina, tuviera una calle en París y una estación del Métropolitain que se llamara Obligado, por la batalla de la Vuelta de Obligado. Le recordó que la Escuadra naval anglofrancesa había logrado ganar la batalla, pero había pedido la guerra. Y le pidió que le cambiaran el nombre.
Dos días después, cuando se firmaban los acuerdos comerciales por los cuales la Argentina otorgaba a Francia un crédito para compras de cereales de 200 millones de dólares, el presidente Vincent Auriol le comunicó que en aras de la renovada amistad franco argentina serían cambiados los nombres de la estación del Métropolitain y de la calle”. De esta manera, la calle Vuelta de Obligado pasó a denominarse “d’Argentine”. Evita, una luz en la historia argentina que dejó su rastro en París.
Hacendado, era dueño de un haras de caballos en Balcarce, ciudad donde presidió el comité local de la Unión Cívica Radical (UCR) y donde fue comisionado municipal.15
Durante el gobierno de Juan Domingo Perón, fue designado embajador especial para asistir al acto de asunción del presidente chileno Gabriel González Videla en 1946, y al año siguiente fue nombrado embajador en Francia, cargo que ejerció hasta 1949.1 En su período en París, acompañó la visita oficial de Eva Perón en 1947, y firmó con el ministro de Asuntos Exteriores Georges Bidault un convenio comercial y financiero.78
Posteriormente fue director del Banco Argentino de Comercio.1
“…El 21 de julio, Evita descendió de su avión en Orly, vestida de blanco, con un sombrero de paja del mismo color, sonriente y un poco pálida. A los pies de la escalerilla, el ministro de Relaciones Exteriores, Georges Bidault, le besó la mano y luego la saludaron el embajador argentino en París, Julio Victorica Roca, y varios embajadores latinoamericanos. Un cortejo de cuarenta coches la acompañó hasta el Hotel Ritz, donde un grupo de niños le presentó un ramo de flores y Bidault se despidió. Como símbolo de la importancia que el gobierno francés daba a su persona, puso a su disposición el auto que había pertenecido al general Charles de Gaulle, el mismo que usaba sir Winston Churchill en sus visitas oficiales a París. Además, durante la estadía la Argentina y Francia firmaron un tratado comercial por el cual este país recibiría un abultado crédito para la compra de trigo y carne. La ceremonia tuvo lugar en el Quai D’Orsay, y finalizada la misma, Bidault condecoró a Evita con la Legión de Honor. Al día siguiente de su llegada, Evita fue recibida por el presidente Vincent Auriol en el castillo de Rambouillet, donde le ofreció un almuerzo…” (Evita. Marysa Navarro)
VIDEO Evita llega a Francia Eva Perón arriba al aeropuerto de Orly y es recibida por el Canciller Georges Bidault. Duración 1 minuto https://www.youtube.com/watch?v=T7NjQBNsCWc
VIDEO Evita en Francia. Eva Perón visita el castillo de Rambouillet, en Francia para almorzar con el presidente Vincent Autiol. Duración 3 minutos https://www.youtube.com/watch?v=jSzwYgMeSuU
The Order of Isabella the Catholic (Spanish: Orden de Isabel la Católica) is a Spanish civil order in which membership is given to honor services that benefited the country.
The Order of Isabel the Catholic was instituted by King Ferdinand VII on 14 March 1815. The original statutes of the Order were approved by Royal Decree of 24 March, with membership made in three classes: Grand Cross, and Knights of First and Second Class. Ferdinand VII was declared the Order's Founder, Head, and Sovereign. On 7 October 1816, at the suggestion of the Chapter of the Order, the Knights of the first class were renamed Commanders and the second class were renamed Knights.
By royal decree of 26 July 1847, Isabella II reorganised the four royal orders in Spain: the Order of the Golden Fleece, the Langues of Aragon and Castile of the Order of Saint John of Jerusalem, the Order of Charles III, and the Order of Isabella the Catholic. The latter was reserved to reward exclusively the services rendered in the Overseas territories. The classes of the order became Knight, Commander, Commander by Number, and Grand Cross. The concession and tests of nobility was suppressed in all the Royal Orders. By royal decree of 28 October 1851, no concessions of Grand Cross of any orders were to be made without the proposal of the Council of Ministers and concessions for the lower classes with the proposal of the Secretary of State.
After the establishment of the First Republic, the Order was declared to be extinguished by Decree of 29 March 1873 as deemed to be incompatible with the republican government. Use of the various insignias was allowed to those who possessed them. When King Alfonso XII ascended to the throne, the Order was reestablished by Decree of 7 January 1875.
Coat of arms of Alfonso XIII, with collar and heraldic mantle of the Order.
During the minority of Alfonso XIII, his mother and Regent, Maria Cristina, signed the royal decrees of 15 April 1889 and 25 October 1900. Among other things, they sought to impose entry into the Order by the category of Knight, to prohibit the use of decorations until the corresponding title was obtained, and to ratify the obligation that the Grand Cross be awarded with the agreement of the Council of Ministers and for conferees to be published in the Official Gazette. By Royal Decree of 14 March 1903, the Silver Cross of the Order was created, and by Royal Decree of 15 April 1907, the Silver and Bronze Medals.
In Royal Decree 1118, of 22 June 1927, the superior grade of Knights of the Collar was created, to be awarded to prominent personalities of extraordinary merit. It also provides that women can also be decorated with either the lazo or banda.
The Provisional Government of the Republic, by decree of 24 July 1931, abolished all orders under the Ministry of State, except for the Order of Isabella the Catholic. The regulations approved by decree of 10 October 1931 introduced a new degree: Officer (Oficial). By decree of 8 August 1935, it was established that the first degree in the Order of Isabella the Catholic was that of the Grand Cross, the Collar being reserved exclusively for very exceptional cases.
In 1938, Franco, by decree of 15 June, restored the Order in its traditional meaning: to reward meritorious services rendered to the country by nationals and foreigners. The order's regulations were approved by Decree of 29 September 1938. According to the 1938 regulations, the order consisted of the following grades: Knight of the Collar, Knight Grand Cross, Commander by Number, Commander, Knight, and Silver Cross. Decree 1353/1971, of 5 June, re-incorporated the rank of Officer, placing it between the grades of Knight and Commander. Thus, the Order consisted of the following grades: Knight of the Collar, Knight of the Grand Cross, Banda de Dama (denomination of the Grand Cross when granted to ladies), Commander by Number, Commander, Officer, Knight, Lazo de Dama (the degree of Knight when it is granted to ladies), and Cruz de Plata.
The order's current regulations date from 1998 as approved by Royal Decree 2395/1998, of 6 November. Among its provisions, the categories of Banda de Dama, Cruz de Caballero and Lazo de Dama were repealed to avoid possible interpretations of there being gender discrimination. Notwithstanding this, for aesthetic and functional reasons, the ladies who are decorated use reduced versions of the insignia of each degree of the Order.