He aquí algunas maneras de pensar para amargarse la vida a uno mismo y a los que le rodean:
r Nunca preguntes a nadie cómo se encuentra, podrían pedirte consejo, o peor aún ¡dinero!
r Fíjate una meta, y cuando la logres, no la disfrutes, márcate un nuevo objetivo, a ser posible más difícil.
r¿Se ha perdido o se ha roto algo? antes de arreglarlo busca al culpable.
r Estás en desacuerdo con alguien, mejor retirarle la palabra para evitar discusiones.
r Tienes un mal día y todos a tu alrededor ríen encantados, ¿es que no se dan cuenta que me molestan?
r Dos compañeros que estaban hablando se callan cuando te acercas, seguro que te estaban criticando.
r¿Luchar por una causa? ¿Para qué? Nadie lo ha hecho antes por ti.
r¿Hay
algo malo en tu vida? Piensa en ello a todas horas. ¿Para qué
vas a pensar en lo bueno? ¡No necesita ser cambiado!
r No te interesa nada si alguien te hace una crítica, seguro que lo dice porque te odia y ya está.
r Un amigo te pide un favor: mejor negarse, das el pie y te toman la mano.
r¿Todo marcha bien? entonces teme al futuro, todo lo que sube debe bajar.
r Una de tus máximas en la vida es: ojo por ojo y diente por diente.
Desconozco su autor
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