EL MIRADOR DE LOS CUATRO POSTES . AVILA (Carlos Velayos ). 1
Ávila de los Caballeros es una ciudad española situada en la
Comunidad Autónoma de Castilla y León, capital de la provincia homónima. «Ávila
de los Caballeros» es un título honorífico de la ciudad. Otro, es
«Ávila del Rey», y aún otro «Ávila de los leales», todas están
presentes en la bandera de la ciudad. La ciudad se caracteriza especialmente por tener una muralla medieval completa, románica. También
es una de las ciudades con mayor número de iglesias (románicas y
góticas) y de establecimientos hosteleros en relación al número de sus
habitantes. Es considerada por muchos como la ciudad de «Cantos y de
Santos». De ella dijo el escritor José Martínez Ruíz, «Azorín», tras
escribir «El alma castellana», que era «quizá la ciudad más siglo XVI
de España». : El escudo de Ávila consiste en un campo de gules o
rojo en el que aparece representado el rey Alfonso VII en el ábside de
la Catedral de Ávila junto al lema: «Ávila del Rey, de los leales, de
los caballeros» Situación
Situada a 1.131 m de altitud, en
un promontorio rocoso a la orilla derecha del río Adaja, afluente del
Duero, es la capital de provincia más alta de España. Su término
municipal abarca 231,9 km² y el gentilicio con el que se refiere a sus
habitantes es «abulense» o «avilés», con sus plurales «abulenses» y
«avileses».
Geografía
Limita: al norte con los
municipios de Cardeñosa, Mingorría, San Esteban de los Patos, Tolbaños,
Berrocalejo de Aragona, Mediana de Voltoya y Ojos-Albos, al este con el
de Santa María del Cubillo, al sudeste con los de Navalperal de Pinares
y El Herradón de Pinares, al sur con el de Tornadizos de Ávila, al
suroeste con el de Gemuño, al oeste con los de El Fresno, La Colilla,
Martiherrero y Marlín y al noroeste con los de Bularros y Monsalupe. La
ciudad se encuentra situada entre la fosa y el valle de Amblés. Las
precipitaciones anuales son bajas comparándolo con zonas colindantes;
esta sombra pluviométrica implica que el caudal del rio Adaja esté
prácticamente seco varios meses del año y que la ciudad haya tenido
históricamente problemas de abastecimiento de agua. El nombre de la
ciudad tiene su origen en los pueblos y tribus que han habitado durante
milenios la provincia. Los primeros fueron los vetones, que la llamaron
Óbila (monte alto), siendo uno de los castros más importantes de esta
tribu, junto con Sanchorreja, Berrueco, Mesa de Miranda, Las Cogotas,
El Raso y Ulaca. Los vetones dejaron vestigios por toda la geografía de
la provincia de Ávila, especialmente en forma de verracos.
PANORÁMICA DE AVILA . ( Carlos Velayos ) .
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Edad antigua
Más tarde la poblaron los romanos, dándole el
nombre de Abila o Abela. Los romanos dejaron también su huella en la
ciudad, que consistía por entonces en el actual casco viejo, la parte
rodeada por las murallas. Calzadas, mosaicos o la plaza del Mercado
Grande, o El Grande, son parte de los restos romanos que pueden
contemplarse en la actualidad. El interior de la ciudad aún mantiene
el trazado típico de las ciudades romanas tipo hiberna (castros
estables), de contorno rectangular, con dos calles principales (cardo y
decumano) que se cortan ortogonalmente en el centro donde estaba el
foro. Actualmente este trazado aparece sólo parcialmente modificado,
reconociéndose fácilmente antiguas entradas romanas en las puertas de
San Vicente y Gonzalo Dávila, donde los cubos defensivos originales
fueron conglobados en la muralla medieval. También se mantienen las
manzanas cuadrilongas recuerdo de las insulae romanas. El Cardo
máximo corresponde a la actual Calle de Vallespín; mientras que el
Decumano máximo lo constituirían la Calle de los Caballeros y la Calle
de Bracamonte. Todas ellas confluyen en el «Mercado Chico» que fue el
antiguo foro. Por su parte, la necrópolis romana estaba al este, más
allá de la Calle de San Segundo, de modo que en toda esa parte de la
muralla se pueden observar piezas funerarias reaprovechadas como
materiales de construcción: estelas, aras, cipos, «verraquitos» y
cápsulas cinerarias de granito, incrustados en los lienzos del muro
oriental. Aparte de estas muestras arquitectónicas, existen
numerosos restos cerámicos, monedas y otros objetos arqueológicos
representativos de la vida cotidiana en la Antigüedad. Edad Media Visigodos
Los
primeros asentamientos visigodos en la península se consideran
geográficamente muy cerrados. Según Palol y sus estudios, los
asentamientos visigodos en España comprenden las ciudades de Burgos,
Soria, Guadalajara, Toledo, Ávila, Cáceres, Madrid y Palencia, lo que
induce a pensar que la elección de estos asentamientos fuera
estratégica. Aunque su ubicación concreta no está determinada en la
ciudad de Ávila, se cree que fue una de las plazas fuertes de la época
visigoda. Durante los siglos VI y VII no hubo conflictos destacables en
la ciudad. Los visigodos utilizaban la tierra para cultivar cereal y
alimentar a la ganadería, según se puede observar en las pizarras
encontradas en el municipio de Diego Álvaro. La importancia de Ávila en
este periodo se debe a su carácter religioso, según la documentación
existente que detalla la intervención de los prelados de Abela en los
concilios toledanos. Corrobora el devenir visigodo en Ávila el
templo de Santa María de la Antigua. Las crónicas registran que este
monasterio fue fundado antes del año 687, siendo monasterio mixto (para
ambos sexos) hasta la llegada de los árabes. Su importancia era tal que
se cita como el lugar donde murió Santa Leocadia, hija del Rey Wamba.
En esta iglesia estaría enterrado también el duque Severiano, un noble
visigodo. Invasión musulmana No se puede precisar por falta de
datos las circunstancias y vicisitudes durante la etapa de dominación
musulmana ni tampoco concretar la relación social, económica, cultural,
política y religiosa que pudieran tener esta creencia en Avila. Lo
único que parece seguro es que durante los primeros años de la invasión
musulmana la ciudad se convirtió en un punto estratégico, siempre
deseada por árabes y cristianos como enclave defensivo, y los
enfrentamientos por su posesión fueron permanentes. Hubo incursiones de
los reyes cristianos en la ciudad después de la ocupación musulmana
pero no llegaron a asentarse. Alfonso I y su hijo Fruela llevaron a
cabo varias expediciones llegando a entrar en la ciudad (740-742) sin
ánimo de permanecer, más bien con intención de destruir las defensas,
recaudar botín y a la vez, aprovechando que los pobladores cristianos
de la ciudad seguían al rey en su repliegue, obtenían pobladores para
las tierras ocupadas y guerreros para la defensa de los reinos
cristianos. Tras estas incursiones, se suceden en Ávila tres siglos
de los que se conocen pocos aconteceres. Ávila, como otras poblaciones
de la meseta, debido a que queda en tierra de nadie, sujeta a las
sucesivas expediciones de unos y otros, con la consiguiente destrucción
de campos y poblaciones, quedó prácticamente despoblada. Desde el siglo
VIII estas zonas o ciudades pueden considerarse dentro del llamado
"desierto estratégico" en el que hubo un fuerte despoblamiento,
convirtiéndose a su vez en tierra de nadie y siendo escenario de las
correrías de ambas fuerzas.
PANORÁMICA DE VILA ( Fotógrafo Avila ) . 3
Personajes célebres
San Segundo (siglo I). Se le considera el
primer obispo de Ávila, aunque no está demostrado. Según cuenta la
tradición fue uno de los siete varones apostólicos enviados por San
Pedro y San Pablo para evangelizar la Península Ibérica. Prisciliano
(siglo IV). Obispo de Ávila. Fue, junto a otros compañeros, el primer
hereje ajusticiado por la Iglesia Católica a través de una institución
civil. Alonso de Madrigal el Tostado (1410-1455). Obispo de Ávila,
natural de Madrigal de las Altas Torres. Es considerado como uno de los
escritores más prolíficos de su época. Está enterrado en la catedral de
Ávila en un suntuoso sepulcro obra de Vasco de la Zarza.
El
vallisoletano Fray Tomás de Torquemada es un personaje del siglo XV
ligado a la ciudad de Ávila, donde falleció en el año 1498 a la edad de
78 años. En 1483 fue nombrado por los Reyes Católicos Inquisidor
General de Castilla y Aragón, cargo que ejerció hasta su muerte. En
1492 ordenó la expulsión de los judíos del Reino de España. Isabel I
de Castilla, más conocida como Isabel la Católica nació en Madrigal de
las Altas Torres el 22 de abril, Jueves Santo, de 1451. Fue hija de
Juan II de Castilla y de su segunda mujer, Isabel de Portugal
(1428-1496), asimismo hermana de su predecesor en el trono, Enrique IV. Ha
sido cuna de insignes militares como Sancho Dávila nacido en 1523,
apodado el rayo de la guerra, general de las tropas de Felipe II; o
Juan del Águila, maestre de los Tercios, nacido en 1545, que participó
en grandes acontecimientos bélicos de la época. Igualmente nació en
la provincia don Fernando Álvarez de Toledo, concretamente en
Piedrahíta en 1507, el Gran Duque de Alba, considerado por muchos como
el mejor general de la época y uno de los más grandes de la historia. El
marino y militar Félix Ignacio de Tejada, nacido en Arévalo en 1737,
alcanzó el grado de Capitán General de la Real Armada Española. A los
78 años de edad fue nombrado ministro del Almirantazgo. También
vieron la luz en estas tierras destacados personajes relacionados con
la conquista de América como Blasco Núñez Vela, nacido en Ávila en
1490, que llegó a ser primer virrey del Perú. En Madrigal de las Altas
Torres nació en 1470 Vasco de Quiroga, obispo de Michoacán (México).
Pedro de la Gasca, pacificador del Perú, nació en Navarregadilla en
1494; Pedro de Villagra, gobernador de Chile, en Mombeltrán en 1513; y
Juan Maldonado, fundador de la villa de San Cristóbal (Venezuela), en
Barco de Ávila en el año 1525. Además, en un pueblo de la provincia,
Fontiveros, nació San Juan de la Cruz; y en Ávila, Santa Teresa de
Jesús, las dos figuras que protagonizaron la Reforma Carmelita. En
Sanchidrián (Ávila) nació uno de los pocos músicos españoles de
categoría internacional, Tomás Luis de Victoria, considerado junto al
que fue su maestro en la Capilla Papal, el italiano Giovanni Pierluigi
da Palestrina, uno de los más importantes compositores del
Renacimiento. Su Requiem publicado en 1605 es una de las más relevantes
obras de la polifonía mundial. Jorge Santayana (18631952). Filósofo,
ensayista, poeta, y novelista; pasó su infancia en Ávila. Su padre
Agustín Ruiz de Santayana era diplomático, intelectual y pintor. Su
madre Josefina Borrás, era hija de un oficial español en las Islas
Filipinas. Arturo Duperier (1896-1959). Físico natural de Pedro
Bernardo, destacado especialmente por su estudio de la radiación
cósmica, por el cual llegó a ser propuesto candidato para el Premio
Nobel de Física en 1958. En 1959 le fue concedido, a título póstumo, el
Premio de Ciencias Juan March. Ávila también es el lugar de
nacimiento o residencia de célebres personajes políticos como el
dirigente del Partido Agrario, Nicasio Velayos, ministro de agricultura
en el gobierno presidido por Alejandro Lerroux en 1935, natural de
Cardeñosa o Claudio Sánchez Albornoz, Presidente del gobierno de la
República española en el exilio entre 1962 y 1971. También nació en
esta ciudad el filósofo y profesor José Luis López Aranguren, premio
Príncipe de Asturias de Comunicación y Humanidades de 1995. El
actual guardameta del Real Madrid y de la selección española de fútbol,
Iker Casillas, aunque nacido en Madrid tiene sus raíces en Navalacruz,
localidad abulense originaria de sus padres y donde puede encontrársele
ocasionalmente cuando sus obligaciones lo permiten.