La Actitud Melancólica en el Arte
HIPÓCRATES " EL GRANDE "
( 470 a.C. - 370 a.C. )
La melancolía es uno de los estados de la mente que más ha interesado en Occidente desde que en el V antes de Cristo, Hipócrates, padre de la medicina moderna, la definió asociada a la bilis negra (del griego melankholía, compuesto por melas, negro, y kholé, bilis). Era uno de los cuatro humores producidos por el cuerpo humano (sangre, bilis amarilla, flema y bilis negra) que, aunque hoy parezca absurdo, se creía que provocaban temperamentos particulares, con características específicas y que se combinaban para determinar los estados de salud y enfermedad del cuerpo y del alma.
ESCULTURA
EL PENSADOR - RODIN
REPRESENTACIÓN ESCULTÓRICA DE LORENZO DE MÉDICI - MIGUEL ÁNGEL
GRABADO
LA MELANCOLÍA - Alberto DURERO .1511
Alegoría tradicional de la melancolía
"Lo que abruma a los melancólicos es la horrorosa masacre de todos los posibles , que el curso de la realidad exige ".
PAUL VALERY
La Depresión Melancólica - Melancolía
En la depresión patológica extrema, la depresión mayor, la melancolía, los objetos dejan de estar afectados; todos los objetos. No existe el sentimiento que los haga diferentes, distintos. Esto crea esa sensación de uniformidad, de que todo es igual y que cualquier cosa da lo mismo, que se parece más a la monotonía y al tedio que a la tristeza. La actitud que predomina por parte del melancólico es la de la indiferencia. La tristeza, en tanto afecto, no existe en un individuo desafectado, quien se queja, muy frecuentemente, de no poder sentir. Sin embargo la tristeza acompaña con no poca frecuencia al melancólico, pero no en tanto aquel que ha perdido la capacidad de sentir, lo cual sería contradictorio. Lo acompaña en tanto su melancolía no sea absoluta y pueda apreciar, como en los procesos psicológicos normales, la pérdida de un objeto sentificado por el afecto. El melancólico se ha perdido a sí mismo. Mientras pueda contrastar lo que es con lo que fue y tenga noción de pérdida, la tristeza estará presente en el cuadro. En las melancolías que se prolongan, la tristeza tiende a diluirse dejando al desnudo y en forma más evidente la actitud de indiferencia. Aquí la depresión no aparece claramente como respuesta normal o exagerada frente a la pérdida de un objeto valioso. No es una reacción a situaciones vivenciales. Todo anda aparentemente bien. La familia, el trabajo, la vida social, etcétera. Las novedades, incluso, pueden ser auspiciosas. Sin embargo, el sujeto está deprimido, ya nada le interesa. Lo que antes lo alegraba, ahora le es ajeno. Lo que antes le preocupaba, ya no le preocupa. No está triste; más bien da una sensación de tedio o indiferencia. Todo es igual, monótono, gris, chato. Igual que ayer y que mañana... y siempre. Nada es diferente. Ya no siente nada y la vida carece de sentido. Es lo mismo vivir que morir... o es mejor morir. Los días son monótonamente grises e iguales. La mañana es peor, hay todo un día eterno por delante. La tarde trae algún alivio, la perspectiva inmediata es la “muerte” reversible del sueño. El suicidio es una posibilidad cierta. ¿Qué se ha perdido? En este cuadro, en donde para nosotros el síntoma principal es la indiferencia (ausencia de valores), entendemos que lo que se ha perdido no es un objeto concreto, sino la totalidad de los mismos como objetos significativos, en tanto al ser desafectados dejan de ser valiosos. La indiferencia no es por sí una situación penosa. Permanentemente pasan al terreno de la indiferencia cosas que antes teníamos por valiosas. En el melancólico, lo penoso no es que sea indiferente a todo, sino que no haya nada que pueda ser rescatado como distinto y por lo que merezca la pena seguir viviendo. No es penosa su situación porque haya perdido todos sus valores, sino porque no le queda ninguno. Lo que en la melancolía se da en forma masiva €la desafectación de todos los objetos€ en el sujeto normal se da habitualmente en forma parcial, provocando indiferencia parcial en el sujeto normal, quien se orienta hacia otros mundos de valores que dan sentido a su existencia, e indiferencia total en el melancólico, quien se ve inmerso en una existencia sin sentido. El suicidio, siempre posible, no es un acto de valentía, por lo que tiene de osadía, ni es un acto de cobardía, por lo que tiene de huida; estas categorías tienen sentido en un mundo de valores. Es un acto de indiferencia. Si el vaso de whisky hubiera estado más cerca que el revólver, tal vez no se hubiera matado. En un mundo sin valores, no hay gran diferencia entre vivir como un extraño en un mundo amortiguado de sentido, y no vivir más.
CARLOS G . PEREYRA
PINTURA
MELANCOLÍA . GIORGIO DI CHIRICO . 1912
En la muestra del Grand Palais de París , la sala dedicada al siglo XX, con su título, señala el sentido exacto de la alegoría en el arte moderno: "La angustia de la Historia". En este apartado están las telas de Giorgio De Chirico (autor en 1912 de una obra titulada Melancolía), con sus mundos abandonados, poblados por estatuas, sombras y ruinas. También se presentan, entre otras, pinturas y esculturas de Edvard Munch, Auguste Rodin, Francis Gruber, Edward Hopper, Mario Sironi, Pablo Picasso, Otto Dix y George Grosz. Completaban la exhibición los contemporáneos Ron Mueck (uno de los Young British Artists) y el alemán Anselm Kiefer, de quien se expuso Melencholia (1989), un avión de plomo similar a los que mandó construir Hitler en sus últimos momentos, que lleva en una de sus alas el conocido poliedro del grabado de Durero.
MELANCHOLÍA 1989 . ANSELM KIEFER
FIGURAS . LINO ENEA SPILIMBERGO
Tela que representa a una mujer y un niño -muy dulce y sereno este último-, pintados con severa estructura, con dibujo cerrado y color sobrio.Desde el comienzo de la década de los treinta, pintó mujeres monumentales, pétreas, despojadas de la palpitación de lo orgánico y profundamente melancólicas.
LA MUJER DEL SWETER ROJO 1935 . ANTONIO BERNI .
La mujer de este cuadro , muestra una actitud pensativa y ausente , está ensimismada en sus pensamientos .
PRIMEROS PASOS. 1936 . ANTONIO BERNI
En Primeros pasos (Museo Nacional de Bellas Artes), se reitera el motivo de la melancolía. Detrás de la joven bailarina, liviana y grácil, contrasta el duro y distante personaje femenino que, en actitud pensativa y melancólica, está sentado frente a una máquina de coser. Quizás, la composición alude a la meditación de la mujer sobre el futuro incierto.
LA SOPA DE LOS POBRES . 1884 de REYNALDO GIUDICE .
Obra encuadrada en el realismo de intención social , en auge en la Europa de fin del siglo XIX y también en el costumbrismo .
Especialmente paradigmática resulta la expresion del rostro de la mujer que sostiene a un niño en su regazo .
La melancolía para estos artistas es una alegoría de la desesperanza , del desaliento frente al destino .
1-http://sdelbiombo.blogia.com/2009/031201-el-pensador-de-rodin.-un-moderno-muy-clasico-primera-parte-.php EL PENSADOR DE RODIN . UN MODERNO MUY CLÁSICO . I-II-III-IV . Vicente Camarasa
2-http://www.herreros.com.ar/melanco/pereyra.htm
PSICOGENIA Y PATOGENIA DE LA DEPRESIÓN . Carlos G. Pereyra
3-http://blogs.periodistadigital.com/eldivan.php/2007/03/08/p79471 ARTE Y MELANCOLÍA . Jorge López Anaya
4-http://impreso.milenio.com/node/7098969
MELANCOLÍA EN LA OBRA DE CHIRICO