Los tópicos del machismo al volante son muchos, aunque afortunadamente parece que poco a poco se van erradicando. Lástima que haya empresas del sector que no prediquen con el ejemplo... por mucho que traten de justificar con estadísticas sus injustificables prácticas.
La red de autoescuelas RACC (Real Automóvil Club de Cataluña) en Zaragoza cobra casi 200 euros menos a los chicos que quieren sacarse el carnet de conducir que a las chicas porque consideran que ellos necesitan menos clases... Si el alumno es un varón abonará 665 euros y si es una mujer, 850. Vamos que en lugar de baremar por la valía de cada uno y, por tanto, por la cantidad de clases que cada individuo necesite, RACC prefiere meter a todos los hombres (hábiles y torpes) en el mismo saco, el de los buenos, y a todas las mujeres (hábiles y torpes) en el de los malos. Lo que viene a ser una discriminación sexista en toda regla.Sin duda es para preguntarse... ¿todavía quedan mujeres matriculadas aquí?