La provincia de San Luis conserva la primera escuela que fundó Sarmiento. En Talampaya, La Rioja, se descubrieron restos fósiles de uno de los primeros dinosaurios que habitaron la Tierra.
El invernáculo de hierro y vidrio del Jardín Botánico porteño fue traído desde Francia en 1900. Santiago de Liniers habitó en 1810 una estancia en Alta Gracia, Córdoba, que había pertenecido a los jesuitas.
Datos como éstos, acompañados de fotografías y de información detallada, son parte de la obra Patrimonio histórico de la Argentina , una nueva colección de fascículos que LA NACION entregará a sus lectores a partir del sábado próximo. Se trata de 105 fascículos, que formarán dos tomos y que acompañarán el diario los jueves y los sábados. En la primera entrega, el sábado 24, como promoción lanzamiento, se incluirán los dos primeros fascículos y la tapa del primer tomo de regalo.
La obra original, pensada para toda la familia, no sólo describe los monumentos, los edificios, los yacimientos arqueológicos y los testimonios históricos que forman parte del patrimonio común de los argentinos, sino que, además, detalla los acontecimientos históricos que enmarcaron cada uno, en un recorrido provincia por provincia. A la calidad editorial de Santillana se suman, en su contenido y despliegue, los textos póstumos de Félix Luna y los aportes del equipo de colaboradores de la revista Todo es Historia . Las páginas incluyen curiosidades, infografías descriptivas, fotografías y mapas.
De una concepción histórica del patrimonio -que privilegiaba las expresiones del período colonial, de la Independencia y de la Organización Nacional- se fue pasando a una visión más abarcadora.
Desde la década del 80, se incorporaron sitios prehispánicos, como el Pucará de Tilcara; testimonios de las corrientes inmigratorias, como el Hotel de Inmigrantes en la ciudad de Buenos Aires; expresiones arquitectónicas, como el Teatro Colón y el edificio Kavanagh, y estaciones de ferrocarril y subterráneo.
En los últimos años, la consigna ha sido involucrar a la comunidad en la defensa y cuidado de los bienes histórico-artísticos colectivos, un objetivo al que LA NACION, a través de esta obra, intenta contribuir.