Si hubieras sido tú
Si hubieras sido tú, lo que en las sombras, anoche, bajó por la escalera del silencio
y se posó a mi lado,para iniciar el cauce de acentos en vacío que, me imagino,
será el lenguaje de los muertos. Si hubieras sido tú, de verdad, la nube sola
que detuvo su viaje debajo de mis párpados y se adentró en mi sangre,
amoldándose a mi dolor reciente de una manera leve, brisa,
aroma, casi contacto angelical soñado ...
Si hubieras sido tú, lo que apartando la quietud oscura se apareció,
tal como si fuera tu dibujo espiritual, que ansiaba convencerme de que sigues,
sin cuerpo, viviendo en la otra vida. Si hubieras sido tú la voz callada
que se infiltró en la voz de mi conciencia, buscando incorporarte
en la palabra que tu muerte expresaba con mis labios.
Si hubieras sido tu, lo que al dormirse descendió como bruma,
poco a poco, y me fue encarcelando en una vaga túnica de vuelo fallecido ...
Si hubieras sido tú la llama llama que inquemante creó,
sin despertarme ni conmover el lago del azoro:
tu inmaterial presencia, igual que en el espejo emerge la imagen,
sin herirle el límpido frescor de su epidermis.
Si hubieras sido tú ...
Ya despierto, después de la vigilia, o del sueño o del ensueño,
me pregunto a mí mismo:
¿Quién más pudo venir a visitarme?
Recuerdo que, contigo solamente, platicaba del amoroso asedio
con que la muerte sigue a nuestra vida.
Y hablábamos los dos adivinando, haciendo conjeturas, ajustando preguntas,
inevitando respuestas, para quedar al fin sumidos en derrota,
muriendo en vida por pensar la muerte.
Ahora tú ya sabes descifrar el misterio porque estás en su seno, pero yo ...
En esta incertidumbre secretamente pienso que si no fuiste tú,
lo que en las sombras, anoche, bajó por la escalera del silencio
y se posó a mi lado, entonces quizá fue una visita de mi propia muerte.