Del salmo 78
R/. No nos trates, Señor, como merecen nuestros pecados.
No recuerdes, Señor, contra nosotros
las culpas de nuestros padres.
Que tu amor venga pronto a socorrernos,
porque estamos totalmente abatidos. R/.
Para que sepan quién eres, socórrenos,
Dios y salvador nuestro.
Para que sepan quién eres,
sálvanos y perdona nuestros pecados. R/.
Que lleguen hasta ti los gemidos del cautivo;
con tu brazo poderoso salva
a los condenados a muerte. Y nosotros,
pueblo tuyo y ovejas de tu rebaño,
te daremos gracias siempre
y de generación en generación
te alabaremos. R/.