A batallas de amor, campo de plumas... Luis de Góngora y Argote
Es un dulce presagio de combate este extenderse entre la bruma intacta de frío albor que con tu albura pacta porque el goce sus ímpetus desate.
Esta albura de lino, y esta mate palidez que en tu vientre se retracta en un sitio no más, con esa exacta negrura azul que alértase al combate.
Largo tu brazo en su extensión dilata la espera voluptuosa e intranquila; mas cae al fin la niebla de tu bata,
cuando ante la pasión que los vigila, de algas y sal al ósculo pirata, se abren lentos los golfos de tu axila.
Alberto Angel Montoya
SALUDITOS...MATILDE
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