Un día llegarás; el amor no espera. Y me dirás: Amada, ya llegó la primavera. Un día me amarás. Estarás de mi pecho tan cercano, que no sabré si el fuego que me abrasa es de tu corazón o del verano. Un día me tendrás. Escucharemos mudos latir nuestras arterias y sollozar los árboles desnudos. Un día. Cualquier día. Breve y eterno, el amor es el mismo en primavera, en verano, en otoño y en invierno. Dora Castellanos |