Piu
Avanti!
No te des por vencido, ni aun vencido,
no te sientas esclavo, ni aun esclavo;
trémulo de pavor, piénsate bravo,
y arremete feroz, ya mal herido.
Ten el tesón
del clavo enmohecido
que ya viejo y ruin,
vuelve a ser clavo;
no la cobarde intrepidez
del pavo
que amaina su plumaje al
menor ruido.
Procede como
Dios que nunca llora;
o como Lucifer, que
nunca reza;
o como el robledal, cuya
grandeza
necesita del agua y no
la implora...
Que muerda y
vocifere vengadora,
ya rodando en el polvo,
tu cabeza!