Es una infección ocasionada por la Trichomona vaginalis, parásito que se encuentra a nivel del tracto genital y urinario tanto del hombre como de la mujer.
Es más frecuente en las mujeres, en quienes es una causa frecuente de vaginitis, uretritis y tal vez de cistitis y, esporádicamente, afecta al hombre ocasionando un cuadro de uretritis o prostatitis. Alrededor del 20% de las mujeres en edad fértil son portadoras del parásito, pero sólo en algunas de ellas aparecen manifestaciones clínicas. En los hombres constituye el 5 al 10% de las causas de prostatitis. En éstos últimos, muchos casos no son diagnosticados, porque en ellos la infección es generalmente leve o no produce molestia alguna.
En cuanto a la transmisión del parásito, se considera que es de tipo sexual; esta teoría se afirma en el hecho de que la edad de mayor incidencia es entre los 20 y los 40 años y por asociarse muy frecuentemente con la gonorrea. El contagio a través de objetos húmedos como esponjas y toallas utilizadas por la persona enferma también representan una vía potencial de transmisión del parásito.
En la mujer, la infección puede no producir ningún síntoma o cursar con abundante eliminación de un flujo genital amarillento verdoso, maloliente, espumoso, asociado a molestias e irritación de la vagina, vulva y parte superior e interna de los muslos. La picazón y la sensación de escozor y quemazón en la zona afectada son signos frecuentes de encontrar. También pueden manifestar aumento en la frecuencia de las micciones y dolor o ardor al orinar y durante las relaciones sexuales. El cuello del útero y las paredes de la vagina pueden presentar buen aspecto, pero más frecuentemente presentan un punteado rojizo con "aspecto de fresa". El malestar general y la fiebre suelen estar ausentes. En el hombre, la infección suele no ser detectable, pero en algunos casos pueden eliminar un flujo por la uretra, purulento, espumoso con gran dificultad para orinar, principalmente durante las primeras horas de la mañana.
El medicamento de elección para el tratamiento de la tricomoniasis es el metronidazol, el cual presenta un índice de curación de alrededor del 95% de las mujeres, siempre que el tratamiento sea extensivo a la pareja. Su forma de administración es tomando comprimidos tres veces al día, asociado con la aplicación de óvulos vaginales por las noches, ambos por un tiempo de diez días. En el hombre, se dan comprimidos dos veces por día durante siete días. El tinidazol es un medicamento alternativo, administrándose durante tres días. Ambos medicamentos pueden producir efectos secundarios muy molestos si durante la toma de los mismos se ingieren bebidas alcohólicas, por lo que deben ser evitadas.
Colaboración CL Gonzalo Retamal Moya
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