Preparen, apunten, ¡Disparen! Uno de los juegos de campo se llama "tiro al plato".
En este juego, los tiradores apuntan y disparan sus armas a los discos que se dispararon en el aire a toda velocidad desde varias direcciones. Cuando el tirador golpea los discos, estos se rompen en mil pedazos en el aire! El concursante que pueda disparar y derribar la mayor cantidad de discos en el menor tiempo posible, es el ganador de la competencia.
Hay una comparación espiritual acerca del "tiro al plato" y nosotros como creyentes podemos usar el mismo concepto para combatir los pensamientos negativos.
Como creyentes, la meta del enemigo es inundar nuestras mentes con pensamientos negativos sobre nosotros mismos y de situaciones en nuestras vidas, con el fin de que, literalmente, creamos que no hay salida y que estamos muertos.
Tal vez usted como yo, siente como pensamientos negativos parecen volar alrededor de su cabeza como si alguien estuviera disparando esos pensamientos como los discos en el aire.
Y tal vez también usted se ha preguntado, ¿porqué y de dónde provienen los pensamientos negativos?
Los pensamientos son hechos pasados almacenados como recuerdos. Nuestro condicionamiento mental y creencias también se almacenan como recuerdos. Los pensamientos pueden ser positivos o negativos en función de lo que nos hemos condicionado a meditar.
El enemigo definitivamente prefiere manipularnos con esto.
Cuando los pensamientos negativos entran en nuestra mente, tenemos menos de 30 segundos para derribar o destruir esos pensamientos, o permitir que se agraven y produzcan una reacción en cadena de pensamientos negativos.
Al igual que el tirador al plato, hay que demoler todo pensamiento negativo que se levanta en contra de lo que Dios dice acerca de nosotros.
Al igual que el tirador experto, tenemos que estar armados y listos para disparar acada pensamiento negativo con la Palabra de Dios como nuestra munición.
Debemos destruir todo pensamiento como "Nadie me ama". Acaba con ese pensamiento con Romanos 5:8 "Mas Dios muestra su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros!"
"Mi pasado es tan malo, Dios nunca me va a perdonar". Acaba con ese pensamiento con Fil. 3:13-14 "Hermanos, yo mismo no pretendo haberlo ya alcanzado; pero una cosa hago: olvidando ciertamente lo que queda atrás, y extendiéndome a lo que está delante, prosigo a la meta, al premio del supremo llamamiento de Dios en Cristo Jesús."
"Nunca me voy a poner bien". Acaba con ese pensamiento con Salmos. 107:20 "Envió su palabra, y los sanó,Y los libró de su ruina".
"Me va a vencer la tentación". Destruye ese pensamiento con 1 Corintios 10:13 "No os ha sobrevenido ninguna tentación que no sea humana; pero fiel es Dios, que no os dejará ser tentados más de lo que podéis resistir, sino que dará también juntamente con la tentación la salida, para que podáis soportar". Ya identificó el blanco, ¿verdad?
Entonces, querido, con la velocidad, la precisión y exactitud de un tirador experto, vamos a demoler y destruir al enemigo y cada pensamiento que se levanta en contra de la Palabra de Dios y lo que dice acerca de nosotros.
Podemos hacer lo que Dios dice que podemos hacer, ser lo que Dios dice que podemos ser y tener lo que Dios dice que podemos tener.
Preparen, apunten, ¡Disparen!
2 Corintios10:5 "derribando argumentos y toda altivez que se levanta contra el conocimiento de Dios, y llevando cautivo todo pensamiento a la obediencia a Cristo"
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