He caído pronto en tus redes invisibles que tú lanzaste en mi mar y sobre mi playa tan varada en mís páginas que escribiste con tu pluma de sueños en...
mi almohada. Me hipnotizaste con tu imagen tan bella con tus maneras de sentirte enamorada que llegaste a lucir en mí como una estrella canto sublime en mi mente de alborada. Que llegaste a confundirte en mí de quién espera una extensa pasión de la noche a la mañana que con tu cuerpo en sudor y entrega cumples con tu universo de querida y amada. He caído en los reflejos de tu espejo donde queda tu imagen pétreamente grabada en la retina de mi cerebro y mis recuerdos allí donde descansa la esencia de mi alma. He caído en tus brazos o he querido caer tan amantes, tan queridos, tan desnudos en tú cosmos de hembra y de mujer así es para escribir juntos nuestro futuro.