Un día, la verdad se dirigió visitando los hombres sin ropa y sin adornos, tan desnudo como su nombre. Y todos los que lo vio volvieron atrás la vergüenza o el miedo y nadie le dio la bueno- que viene.
Así que la verdad corrió los confines de la tierra, rechazado y despreciado.
Una tarde, muy desconsolada y triste, se encontró con la parábola que caminaba alegremente, en un traje hermoso y colorido. - la verdad, ¿por qué estás tan deprimido? - preguntó la parábola. - ¿por qué debería ser feo ya que los hombres a evitar tanto! - sin sentido! - Se rió de la parábola- no es por qué los hombres que deben evitarse.Aquí, el desgaste algunas de mis ropas y ver qué pasa . Así que la verdad puso algunas de las hermosas vestiduras de la parábola y, de repente, en todas partes donde se aprobó era bienvenida. - ... Porque los hombres no les gusta a cara la verdad desnuda; prefieren disfrazados.