

Un día te despiertas sintiendo un extraño anhelo por esos besos que nunca diste. Un día te sorprendes perdiendo los abrazos que nunca recibiste. Un día tu pensamiento va hacia atrás, caminando por caminos que nunca recorriste. La vida es este reloj invertido que gira y retrocede. El tiempo mueve el pensamiento y lo hace revertir. Vuelves a donde no quieres. Recuerdas lo que no sucedió. Intenta revivir lo que no vivió. Intenta encontrarte donde nunca te perdiste. Un día duermes tratando de olvidar y te das cuenta de que no puedes tener lo que nunca fue tuyo. La vida pasa muy rápido y nos metemos en esta tonta espera. Los días pasan y siempre decimos "no hoy", "espera un poco más", "ahora no podemos". Y la vida pasa y ni siquiera la vivimos. El tiempo corre por la vida como una flecha, y en este torrente desenfrenado de rutinas tumultuosas, la vida está siendo atacada. Y siempre ponemos excusas para todo. Fue el momento en que terminó, el dinero que se acabó y la ropa que no combinaba. Era el día correcto para no venir, la cita no estaba programada y la invitación se rechazó. Fue el paseo pospuesto, el amor rechazado y el sueño tardío. Oportunidades que descartamos. Vivir no puede ser citas en calendarios. Deja que la vida te sorprenda. No esperes a que tu historia se haga realidad. Necesitamos ser conscientes de que no es eterno. La vida es fuego Un día arde, un día calienta, un día se apaga. La vida es una colección de decisiones que tomamos, las dulces palabras que hablamos, las cosas buenas que escuchamos, las oraciones duras que nos ahogan y la basura que guardamos. La vida es lo que llevamos y lo que dejamos en el pasado. La vida es un tiro. Es un plato caliente. Es un tiro de flecha, con toda la fuerza tirada, sin saber que el objetivo somos nosotros. Somos momentos, reconstruidos por momentos, somos lo que pasa, lo que queda, lo que se perpetúa con el tiempo. El anhelo es algo muy extraño, nos recuerda dos pasados: uno que vinimos a vivir y otro, donde extrañamos lo que nunca sucedió. Ayer puede ser tuyo, pero mañana pertenece solo a Dios. El reloj corre. Entonces no te arrepientas de lo que no hiciste. ???? Nos recuerda dos pasados: uno que vinimos a vivir y otro, donde extrañamos lo que nunca sucedió. Ayer puede ser tuyo, pero mañana pertenece solo a Dios. El reloj corre. Entonces no te arrepientas de lo que no hiciste. ???? Nos recuerda dos pasados: uno que vinimos a vivir y otro, donde extrañamos lo que nunca sucedió. Ayer puede ser tuyo, pero mañana pertenece solo a Dios. El reloj corre. Entonces no te arrepientas de lo que no hiciste. ????- Cleonio Dourado -

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