Cantares vi
Negros tenías los ojos,
y la piel color canela…,
y oscilaban tus antojos
como la luz de una vela.
Tus modales eran suaves,
tu sonrisa a flor de labio;
pasaste como las aves,
sin inferirme un agravio.
Había, en tu corazón,
una promesa de dicha,
mas, no sé por qué razón,
yo preferí la desdicha…
CORINA BRUNI