Con un sol brillante iba una niña con un caminante. La niña era hermosa era una flor era una estrella era un primor. El caminante era muy feo era un cantante, era muy bueno. La niña hermosa le dijo al cantante tu no eres muy feo y un caminante. El caminante le dijo con calma pues la belleza la llevo en el alma. Dijo la niña tenes razón te doy belleza por tu valor...
Colaboración de:Elva Bojorges