Por Lic. Ana Fernández Molina, Equipo de Bien Simple Licenciada en Nutrición M.N. 2405 Si en las próximas Fiestas te da por comer mucho y luego no te sientes bien, no desesperes. Aquí tienes algunas recomendaciones para bajar de peso y estar en armonía con tu cuerpo nuevamente.
Pasos
1
No te saltees el desayuno. Si te despiertas sin apetito, haz el esfuerzo de tomar una infusión y acompañarla con una tostada o dos galletitas untadas con queso descremado o mermelada light.
2
Bebe mucho líquido, especialmente agua, aguas saborizadas, jugos sin azúcar, caldos bajos en grasa y en sodio, infusiones sin azúcar y gelatinas light.
3
Consume muchos vegetales y frutas: te brindarán saciedad, sensación de bienestar y frescura. También puedes comerlos entre horas, como tentempié.
4
Incorpora pequeñas porciones de proteínas. Por ejemplo, los pescados tienen muchas y se digieren más rápido que las carnes rojas.
5
Elige preparaciones livianas para no sumar más calorías ni padecer pesadez digestiva. Evita las frituras, las carnes en salsas o cremas.
6
Cena muy liviano. En lo posible, un par de horas antes de irte a dormir.
7
El primer día después de Navidad o Año Nuevo puedes recurrir a este menú desintoxicante: • Desayuno: jugo exprimido de naranja (o pomelo) sin azúcar, una banana y medio bol de frutillas. • Almuerzo: ensalada de hojas verdes, apio y tomate, con una cucharada sopera de aceite. Un cítrico a tu elección y una infusión con edulcorante. • Merienda: ensalada de frutas sin azúcar y una infusión con edulcorante. • Cena: un yogur descremado, una manzana y una infusión con edulcorante. • Entre horas: toda la cantidad de líquido que desees.
Importante
• Aumenta la actividad física en los días posteriores a las fiestas: realiza alguna caminata, sal a correr o quédate media hora más en el gimnasio. • Ingiere líquidos para eliminar toxinas y tener sensación de saciedad.
La noche quedó atrás, un nuevo día se asoma en tu horizonte de ventura. En lo que fuera llanto, hay alegría en lo que fue rencor, hoy hay ternura.
Ya eres otro. Bajo el conjuro de la palabra "Amor" te has superado. Todo es más noble en ti. Todo es más puro, porque todo de amor se te ha llenado.
¡Amar y solo amar! Esa es la clave que mueve al universo, a la vida. Lo duro de la senda es más suave si tú puedes decir: "Ama y olvida".
Amar a Dios, a ti, al mundo entero. A los que tú conoces, al extraño, al rico, al poderoso, al pordiosero, al que te da la paz o te hace daño.
¡Tú ya eres otro!, porque has podido arrancar la cadena que te ataba a tu eterno "Imposible", y has sabido trasponer el dolor que te agobiaba.
Llena tu mente de las cosas buenas, de las cosas positivas que construyen y deja en el ayer todas tus penas, las negaciones que todo lo destruyen.
Tu hogar será de dicha, y en los tuyos hallarás el "Por qué" de tu camino. Y todo para ti será de orgullo, y tus hijos tendrán otro destino.
Y tú que eres soltera, buscarás, no al hombre que halague tus sentidos, sino al alma que te comprenda más, porque el alma hace al hombre y no el vestido.
La noche quedó atrás. Un nuevo día se anuncia en el dintel de tu ventana. Ya no dejes que escape tu alegría ni que vuelva el ocaso a tu mañana.
Ya no vivas de ayeres, de lamentos. Ya no suenes tu nota discordante. Piensa siempre en todos tus momentos, ¡que la vida comienza a cada instante!