En la cocina, el fregadero estaba rebosante de platos sucios, el detergente regado por todo el piso, la llave del agua abierta,
salsa catsup en las paredes, la comida del perro regada por todo el piso, leche tirada junto a refri, calcetines en la mesa,
un vaso roto bajo la mesa del desayunador, y algunos montones de arena cerca de la entrada de la puerta trasera.
Rápidamente se dirigió hacia las escaleras, pisando juguetes, ropa, palomitas, zapatos, brincó unos patines, un plato y un
trozo de pan con cajeta que estaba en los escalones, buscando desesperadamente a su esposa.
Estaba muy preocupado pues pensó que había pasado algo serio, o que tal vez pudiera estar enferma, o que hubieran
entrado unos ladrones, qué sé yo, cuántas cosas se imaginó, al llegar a la recamara, encontró a su esposa sentada en la
cama, en pijama, con una toalla enredada en la cabeza, pintándose las uñas de los pies, tarareando una melodía,
un vaso de soda, una bolsa de fritos abierta, una revista de TV y Novelas y viendo el Big Brother no sé que número.
La esposa volteó a verlo y le sonrió felizmente, después le preguntó cómo le había ido.
Él la vio totalmente extrañado y le pregunto:
- ¿!!!!!!!!!!Pero qué pasó aquí hoy!!!!!!!!!!!?
Ella sonrió de nuevo y respondió:
- recordarás que cuando llegas de trabajar me preguntas:
-¿QUÉ DEMONIOS HICISTE EN TODO EL DÍA?"
Si... contestó incrédulamente el esposo.
- Bueno, -respondió ella, -pues HOY no hice nada en TODO el día.