Efecto secundario
No me bastó la vida ni los consejos que recibía; que por no aceptar mi realidad ignoraba.
Sólo la muerte me hizo mirar la vida que ya no tengo de otra manera, que estaba equivocado, yo sólo cause mi muerte. Ahora recuerdo cuando comencé a cavar mi tumba: aquel día que la curiosidad y la depresión me hicieron drogarme por primera vez todo comenzó con una sensación agradable, feliz, nada me detenía; el principal efecto de aquella sustancia y el más doloroso era mirar a mis seres queridos como enemigos transformando sus consejos en regaños sus palabras de preocupación en duras criticas; su amor en una profunda indiferencia.
Indiferencia que alimentaba mi soledad y mi adicción a aquella sustancia que era mi única compañía. Ahora sólo los puedo mirar, me encantaría que me escucharan, pedirles perdón decirles que esa sobredosis no fue mi muerte, fue mi cura. Cierro mis ojos y en un momento veo pasar mi vida efectos secundarios... Tal vez... Lágrimas salen de mis ojos ¡lástima que ya no las pueda sentir!