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Querida Vasija de Honra:

Me gustaría hablar algunas cosas con usted sobre lo que creo es uno de los aspectos más importantes de la vida cristiana; su relación con una iglesia local.

Cuando usted se une a una iglesia, hace un pacto no sólo con el cuerpo local de Cristo, sino también con Dios de obedecer el liderazgo de esa iglesia.  Por otra parte, el liderazgo tiene la responsabilidad ante Dios de velar sobre su alma.

Cualquier pastor que verdaderamente entienda su función en la iglesia tomará la vigilancia sobre las ovejas muy en serio.  Muchos miembros no se dan cuenta lo fuertemente que esta responsabilidad puede pesar sobre su pastor.  Es doloroso para los líderes de una iglesia cuando las personas de la iglesia rechazan el consejo y sabiduría que puedieran recibir a través del liderazgo de la iglesia local.

Un concepto poco entendido en la iglesia hoy es el de dar honor a los que están en autoridad sobre nosotros.  Por supuesto, no vamos a venerar o adorar a los líderes que están por encima de nosotros, pero necesitamos entender cómo estimarlos y respetarlos.  Los honramos no solo como personas sino también honramos las posiciones en las que el Señor los ha puesto.  A veces, puede que tenga una diferencia de opinión con una persona en liderazgo, pero, aún así, necesita someterse a la posición de autoridad de esa persona o lo contrario sería antibíblico.

Desdichadamente, hay situaciones cuando aparece el abuso en el marco de la iglesia.  El abuso no es bueno, tampoco es la voluntad de Dios, así que ¿qué hacer en una situación espiritualmente abusiva?  En primer lugar, busque al Señor con respecto a si debe irse o permanecer.  Si cree que debe dejar la iglesia o ministerio, hágalo correctamente.  En otras palabras, haga todo lo que pueda para recibir una bendición cuando usted se vaya.  No se vaya corriendo sin despedirse.

El equilibrio entre no someterse al abuso y mantener nuestra actitud correcta puede ser delicado.  Cuando tenemos una reacción adversa hacia algo que  nos dice un líder, es tiempo de investigar nuestro propio corazón.  Necesitamos preguntarnos: ¿Estoy reaccionando por heridas pasadas, o es esto realmente un abuso?  La verdad no puede ser evidente enseguida, sino puede requerir un tiempo de oración de búsqueda del Señor.

Primero de Crónicas 16:22 ha sido de gran bendición para líderes perseguidos, y también se ha sacado del contexto y se ha usado para "golpear a las ovejas".  Este dice: "No toquéis... a mis ungidos, ni hagáis mal a mis profetas".  Este texto se ha tomado érroneamente para significar que las personas en la congregación no pueden pensar por sí o cuestionar cualquier cosa que diga un líder.  Esto no es lo que el versículo quiere decir, y en realidad no es funcional.  Este quiere decir que incluso en medio de nuestros cuestionamientos, necesitamos mantener nuestros corazones correctos y no atacar.  Si vamos contra un líder injustamente, Dios protegerá y cuidará del líder y responderemos ante el Señor por lo que hayamos hecho.

El cuerpo de Cristo es un lugar hermoso.  Pido a Dios la sane de cualquier herida que le haya infligido la iglesia o a través de ella, y que Él le permita disfrutar el compañerismo que Él desea entre su pueblo.

Cindy Jacobs

Líderes no olvidéis que el Señor está en contra los pastores que se ocupan de sus cosas y no del bienestar del pueblo de Dios. (Véase Ezequiel 34:2-10)

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