El dominio de Dios es trascendental; su Reino está sujeto a la voluntad, la palabra y la acción divinas; su autoridad se funda en su preexistencia y santidad.
Lectura : Génesis 1:1
En el principio creó Dios los cielos y la tierra.
El punto de partida ineludible para estudiar el tema "del reino de Dios" es el versículo inicial de la biblia. Aquí encontramos al soberano de todo el universo, cuyo "reinado y gobierno" de describen desde el principio.
1. Su "reino" (es decir el radio de acción de su soberanía) es transcedente; es decir, no sólo incluye a todo el universo físico, sino que lo excede. Existió antes de toda la creación, lo que existe está en Él.
2. Su "reinado" (o el poder mediante el cual gobierna) lo ejerce mediante su voluntad, su palabra y sus obras. Por su voluntad creadora Dios diseña y decide; mediante su palabra da existencia a la creación, y por sus obras, su Espíritu demuestra su ilimitado poder.
3. Su "gobierno" (o autoridad para gobernar) radica en su preexistencia y su santidad. Él es "antes" de la creación, "en el principio". Como Creador, el gobierno de lo creado debe estar en sus manos.
Su belevolente intención de crear cosas "buenas" revela su naturaleza santa (es decir, completa y perfecta). lo cual confirma su derecho moral a regir la creación.
Toda autoridad, reino y poder fluyen de Dios.
Jack W. Hayford
Dios es Creador y sólo Él vive por sí mismo. Nosotros somos sus criaturas. Dios creó todo lo que existe para que después cada criatura se reprodujera según su género.
Como sus criaturas, somos responsables en última instancia ante nuestro Creador.