Fortaleza en medio de la soledad

por Charles F. Stanley

La respuesta a la soledad

Mantener un enfoque en la eternidad. Durante toda su experiencia en la cárcel, Pablo fue capaz de responder de manera agradable, pues su meta era terminar lo que el Señor le había llamado a hacer, y recibir el galardón celestial guardado para él (2 Ti 4.6-8). Sin esta clase de perspectiva, estamos propensos a caer en la amargura.

Seguir testificando. Pablo nunca mantuvo su enfoque en sí mismo. Hasta su último aliento, buscó las maneras de compartir el evangelio de la esperanza. Su última carta está llena de preocupación por los demás, y de consejos para su querido amigo Timoteo. Las limitaciones de su situación no le impedían servir y ocuparse de otras personas.

Dejar los resentimientos. A pesar de haber sido abandonado, Pablo no guardó resentimientos. Cuando nadie lo apoyó, dijo: "No les sea tomado en cuenta" (v. 16). Tampoco tuvo amargura contra Dios por su soledad. Aunque una prisión no era el final apropiado para un siervo tan fiel, Pablo la consideraba la última fase de la misión que recibió del Señor. Soportó valientemente hasta que Dios lo introdujo en su reino celestial.

Permanecer en la Palabra. En la conclusión de su carta, Pablo le pide poco a Timoteo: solo un abrigo y "los libros, especialmente los pergaminos" (v. 13). La capa era, sin duda, para su bienestar físico, pero el material de lectura era para su aliento espiritual. Los pergaminos eran, probablemente, copias del Antiguo Testamento; ellas habían guiado su corazón y su mente durante tantos años, y anhelaba su consuelo y aliento en la fría y solitaria prisión.

Para todos nosotros, habrá momentos en que nos sentiremos solos, cuando otros no podrán o no desearán ayudarnos. Pero pensar en nuestra situación o en los agravios de los demás, solo conduce al resentimiento y a la autocompasión. En cambio, si buscamos al Señor y confiamos en la verdad de su Palabra, descubriremos el consuelo y la fortaleza de su presencia. Nuestras almas se llenarán de valor, dándonos el poder para soportar la soledad y terminar la carrera.

 

Preguntas para más estudio

La experiencia del apóstol Pablo

1. Lea 2 Timoteo 4.6-22. ¿Qué convicción mantenía firme a Pablo (vv. 6-8, 18)?
2. ¿Qué condiciones habían contribuido a su soledad (vv. 9-16)? ¿Cuál era su actitud hacia quienes lo habían defraudado?
3. ¿Cómo lo ayudó el Señor (v. 17)?

La experiencia de Elías

1. Lea 1 Reyes 19.1-18. Elías se sintió solo después de lograr una victoria espiritual. ¿Dónde estaba su enfoque (vv. 1-4)?
2. Antes de ocuparse de sus necesidades emocionales, ¿cómo suplió el Señor sus necesidades físicas (vv. 5-8)?
3. ¿Cómo interactuó Dios con Elías (vv. 9-13)? ¿Fue afable o duro?
4. Elías estaba listo para claudicar, pero el Señor no había terminado con él (vv. 14-18). Cuando nos sentimos solos, ¿cómo puede el sentido de propósito en la vida darnos el coraje para perseverar?

La experiencia del salmista

1. Lea Salmo 71. ¿Dónde pone el salmista su esperanza (vv. 1-6)? ¿Por qué se siente solo (vv. 7-12)?
2. ¿ Cómo responde (vv. 12-16)?
3. ¿Qué meta le da el valor para perseverar (vv. 17-21)?¿Qué actitud encontramos en los versículos 22-24?