¿Ha definido sus prioridades?
Con frecuencia los seres humanos abandonamos o sometemos al olvido lo que realmente reviste importancia, para desgastar nuestras fuerzas en asuntos intrascendentes. ¿Qué era más importante, la cámara o salvar la vida? "Salvar la vida por supuesto", me responderá usted. Estamos de acuerdo. Pero Carlos en ese momento tenía como prioridad su equipo de trabajo.
Quizá desde otra perspectiva, le ocurre algo similar a usted. Olvida su familia para volcarse al trabajo. Permite que sus ocupaciones diarias le roben el espacio que requiere para tomarse un merecido descanso, o quizá, la frase "Estoy muy ocupado" le lleva a distanciarse progresivamente de Dios. Ya no ora, no lee Su Palabra divina y ni siquiera se congrega en la iglesia.
El cierta ocasión el Señor Jesús fue de visita a casa de Lázaro, donde residía con sus hermanas Marta y María: "Marta tenía una hermana llamada María, la cual se sentó a los pies de Jesús para escuchar lo que él decía. Pero Marta, que estaba atareada con sus muchos quehaceres, se acercó a Jesús y le dijo: --Señor, ¿no te preocupa nada que mi hermana me deje sola con todo el trabajo? Dile que me ayude. Pero Jesús le contestó:--Marta, Marta, estás preocupada y te inquietas por demasiadas cosas, pero solo una cosa es necesaria. María ha escogido la mejor parte, y nadie se la va a quitar" (Lucas 10:39-43 Versión Popular "Dios habla hoy").