Aplicación Cuando acompañamos a alguien que atraviesa una prueba, cumplimos la Gran Comisión, de “id, y haced discípulos a todas las naciones” (Mt 28.19). ¿Qué puede hacer usted hoy para “testificar” a quienes están sufriendo?
En este mundo lleno de falsos salvadores, tener credibilidad entre los que sufren, es algo precioso. Jesús dijo: “Nadie tiene mayor amor que este, que uno ponga su vida por sus amigos” (Jn 15.13). Demostrar el amor más grande posible, es una prueba de que conocemos la Fuente de ese amor. Si usted refleja las acciones del Salvador, los demás podrán estar más inclinados a creer sus afirmaciones de que lo conoce personalmente. La conducta se modela por lo que conocemos mejor. Cuando nos comportamos como Cristo, damos prueba de nuestra relación con Él.
Tal como lo profetizó Jesús, las mujeres que habían experimentado el peor de los dolores, tendrían ahora gozo eterno. “Vinieron María Magdalena y la otra María, a ver el sepulcro. Y hubo un gran terremoto; porque un ángel del Señor, descendiendo del cielo y llegando, removió la piedra, y se sentó sobre ella. Su aspecto era como un relámpago, y su vestido blanco como la nieve. Y de miedo de él los guardas temblaron y se quedaron como muertos. Mas el ángel, respondiendo, dijo a las mujeres: No temáis vosotras; porque yo sé que buscáis a Jesús, el que fue crucificado. No está aquí, pues ha resucitado, como dijo” (Mt 28.1-6).
Contexto Al visitar la tumba de Jesús para ungir su cuerpo con especias, las mujeres pudieron haberse arriesgado a tener problemas. Jesús fue crucificado como un criminal y, como tal, no iba a tener los honores de un entierro normal. Su cuerpo estaba siendo vigilado y la enorme piedra sepulcral era un obstáculo, pero ellas decidieron ir.
La vida en este mundo puede tener dolor y angustia, pero cuando todo esto termine, el gozo será nuestro —un gozo tan grande que todo dolor será olvidado para siempre. Quizás es por esto que debemos recibir cuerpos nuevos en la resurrección; nuestros cuerpos mortales no podrán contener un gozo tan intenso. Cuando mi amiga perdió su batalla contra el cáncer, las personas que estuvimos junto a ella fuimos confortadas por saber que a ella le esperaba lo mejor.
Hace dos mil años, Jesús miró desde la cruz y vio que solamente unos pocos amigos suyos se habían quedado con Él. Jesús está hoy en su trono, y observa fielmente a los que están luchando. Que también seamos nosotros fieles para caminar con ellos.
por Ginger Garrett
Amado Padre celestial, en el nombre de Cristo Jesús vengo hoy a darte gloria y honra, alabanza y adoración porque Tú eres bueno y Tu misericordia es para siempre, gracias por el perdón de mis pecados y por la salvación, hoy vengo a darte gracias especialmente por todas y cada una de las preubas, tribulaciones, enfermedades, problemas económicos y por todo desierto que me ha tocado vivir, gracias poroque puedo decir "hasta aquí me ha ayudado Jehová", porque nunca me has dejado sola ni desamparada, en todo he visto tu mano poderosa, gracias porque me has enseñado a confiar en ti y porque en medio de toda circunstancia adversa he aprendido a alabarte y adorarte, sé mi Dios que todo es para bien para los que te amamos, que todo es para perfeccionarnos, para limar toda aspereza, porque Tú deseo es que alcancemos la estatura del Varón perfecto, que adquiuramos Su carácter y seamos obedientes, humildes y agradecidos Gracias Padre porque aqui estamos de paso, y lo que nos espera es glorioso, estar en Tu santa presencia contemplando la hermosura de Tu rostro, en ese hermoso lugar donde no existe el dolor, ni la tristeza, donde nos uniremos al coro celestial y te alabaremos en espíritu y verdad.
Mi alma te alaba y todo mi ser bendice tu santísimo nombre. Eres bello, eres todo para mi. en el nombre de Cristo Jesús te doy gracias porque me escogiste antes de la fundación del mundo, me has puesto nombre y soy tuya, soy oveja de tu prado, soy la niña de tus ojos. bendito seas por los siglos de los siglos, y al que está sentado a tu diestra sea la gloria, la honra, todo loor y todo imperio. Amén
Somos siervas de Dios que trabajamos por la restauración integral del Cuerpo de Cristo y especialmente en la restauración de la
mujer en todas las áreas