Corriendo para Dios
Scott Rigsby
El 13 de octubre de 2007, en el Campeonato Mundial celebrado en Kailua-Kona, Hawai, Scott Rigsby se convirtió en el primer amputado de ambas piernas que terminó el triatlón Ironman. Pero él no siempre aspiró convertirse en un atleta de talla mundial.
Cerca de dos décadas antes, Rigsby, a los 18 años de edad viajaba en la parte posterior de una camioneta con sus amigos después de un largo día de verano, cuando un camión de 16 ruedas se estrelló contra la parte trasera de la camioneta. Rigsby fue lanzado bajo un remolque de tres toneladas y arrastrado a lo largo de unos 90 metros sobre el pavimento. Sufrió quemaduras de tercer grado, el desprendimiento de su pierna derecha, y el daño irreparable de su pierna izquierda.
La décad
a siguiente estuvo llena de hospitales, médicos, depresión y temor. Mientras que sus amigos fueron a la universidad y se hicieron profesionales, Rigsby se convirtió en un “paciente profesional”, soportando 26 cirugías, incluyendo la amputación de su pierna izquierda. Mientras sus amigos se adaptaban al matrimonio y a la paternidad, él tuvo que enfrentar la adicción a las drogas medicinales.
“Un día tuve una conversación con un pastor amigo mío”, recuerda Rigsby. “Habló conmigo durante más o menos dos horas, y lo único que recuerdo es que él dijo que el Señor tenía un plan para mi vida”.
Finalmente, Rigsby dijo una oración sencilla: “Señor, si me abres una puerta, entraré por ella”. Una semana más tarde, vio a un amputado en la portada de Runner’s World Magazine [Revista del mundo de los corredores], y nació en él la visión de una nueva vida: Haría el triatlón Ironman. “Yo no sabía nadar, no tenía una bicicleta, y nunca había corrido más de una milla usando prótesis”, dice. “Pero me dije a mí mismo: Creo que Dios quiere que yo haga un triatlón”.
El camino estuvo lleno de dificultades y dolor. En su primer intento, estrelló su bicicleta y se rompió una vértebra. Varias semanas después —y 21 años después del accidente que le cambió la vida—, Rigsby cruzó la meta en uno de los eventos deportivos más difíciles y prestigiosos del mundo, y hoy es un orador motivacional que ha hecho más de 20 triatlones y establecido numerosos récords mundiales. –TS