En este mes de mayo celebramos el día universal de la madre; en todas partes se destaca a la madre, se le hacen celebraciones y homenajes; se le cantan poemas y canciones, y se le dan regalos. Eso es muy bueno, que los hijos, los esposos y demás personas reconozcan la labor más grande y difícil como lo es la maternidad. ¡Qué bueno que se reconozca!
Pero lamentablemente para muchos ese reconocimiento es solo un dia,el día universal de la madre, pero el resto del tiempo se olvida y lo que es peor, se maltrata a ese ser tan especial.
Honrar, significa valorar o tener respeto .El término honrar no tiene ningún secreto. Nuestros padres naturales deben ser respetados por el hecho de ser nuestros progenitores, no porque merezcan que les respetemos debido a sus valores, ya que incluso debemos honrarles aunque no sean un modelo a seguir.
Dios nos exhorta a honrar al padre y a la madre. Él valora el honrar a los padres, lo suficiente como para incluirlo dentro de los 10 Mandamientos (Éxodo 20:12) y nuevamente en el Nuevo Testamento: “Hijos, obedeced en el Señor a vuestros padres, porque esto es justo. Honra a tu padre y a tu madre, que es el primer mandamiento con promesa, para que te vaya bien, y seas de larga vida sobre la tierra.” (Efesios 6:1-3)
Es sano y justo recordar con cariño clamor y la obra de las manos de nuestra madre
La promesa de Dios consiste en que, si honras a tu madre tendrás una vida larga, vivirás muchos años en esta tierra y te irá bien en la vida, porque el Señor cumplirá su promesa derramando bendiciones sobre ti, bendiciones materiales, familiares y espirituales…
El mandamiento de honrar a los padres es el único mandamiento con promesa: “para que te vaya bien y seas de larga vida sobre la tierra.” (Efesios 6:3). El honor engendra honor. Dios no honrará a aquellos que no obedezcan Su mandamiento de honrar a sus padres. Si deseamos complacer a Dios y ser bendecidos, debemos honrar a nuestros padres. Honrar no es fácil, no siempre es divertido, y ciertamente es imposible en nuestra propia fuerza. Pero el honor es un camino seguro para nuestro propósito en la vida: glorificar a Dios. “Hijos, obedeced a vuestros padres en todo, porque esto agrada al Señor.” (Colosenses 3:20).
Hemos visto que Dios nos manda que honremos a nuestra madre, apreciándola, amándola y proveyendo para ella cuidados y protección, durante toda la vida.
Hay que amar nuestra mamá con todo el corazón y no dejar que el mundo ponga el ejemplo, Dejar que alguien ame a la mamá mas que uno y si estamos en casa el consejo es no deje que nadie la ame mas ni la respete mas que yo.
Gracias hermanita Perlita por tu bello homenaje a las madres.
Gracias por tu amistad hermanita Perla.
Gracias en el amor de Dios.
Dios estará siempre contigo y con todos uds.
GRACIAS POR TU AMISTAD, FELIZ DIA.
Hermes Sarmiento G
De Colombia