Una prosa pagana…
Una tristeza de paloma herida invoca este cantar…
Esta pena que amenaza desbordar,
está llena de virtudes muertas,
dolores que gotean de mis pestañas
y tienen el sello de la soledad…
No sé de dónde nació tanta soledad,
ni quién, tiene la culpa de ella,
pero sé que deja a su paso,
seca mi alma de ilusiones vanas,
secos mis ojos de mirar a tientas,
seca la boca de palabras ciegas,
secos mis labios de besos ausentes…
Si pudiera arrancarme del alma
esta tristeza de paloma herida,
pintaría el mundo de colores nuevos,
atrapando al tiempo sus dulces sonidos
y a la alondra de blando plumaje
que reclama melodías al viento,
entregaría mi tristeza en do mayor;
para llevar a un lejano territorio
y enterrar el recuerdo muy junto al olvido…
Si pudiera arrancarme del alma
esta tristeza de paloma herida,
me sentiría ligera como hoja de otoño
y en mi boca mendiga de amores,
volvería a florecer una oración,
y esta prosa pagana moriría
sin una canción…
Ninfa Duarte.