A una flor en el camino: Una rosa en el jardin, que esté cerca del camino, tiene un peligro eminente al paso del peregrino. Porque ha de evitar, que la pueda deshojar, un vendaval-torbellino.
Rosa tú que estas morando, tan inmediata al destino. ¿Dime si has visto pasar al inmoral beduino, que desea robar tu belleza, para llevarla consigo ?
Tu no te debes fiar por ningúna flor de espino, que puede causarte daño, un daño que no te digo.
Tienes que afianzar tus raices, para que ningun vendaval pueda cambiar tu destino; que será proporcionar, aromas de olores finos, para que el que a tu lado pase, guarde un recuerdo divino, porque tu tienes espinas,clavadas en tus sentidos, ya que las llevó Jesús en su corona - martirio-, para pedir a su Padre, el perdón para sus hijos. Autor:_Casimiro López Cano_