DISOLVENCIA
Yo dejé de pensarte;
te quité poco a poco
de aquellos espacios
en los que de pronto
fuiste muriendo de súbito
y premeditadamente,
al mismo tiempo.
Te dije tan sólo:
hasta la vista,
sin esperar tu respuesta.
Pues siempre
viviste en mí
en actitud de adiós.
Nunca te oculté;
tú supiste hacerlo solo
y yo aprendí con el tiempo
a cubrir de indiferencia
cada mirada de mis ojos
que te amaban.
TE QUIERO EN FUGA
CelesteLuz©Todos los derechos reservados 2012.
Caracas, Venezuela.