El Amor es una estrella, tan grande, que todo lo contiene, y tan pequeña que cabe en cualquier hueco, cualquier espacio.

Si dejas abierto tu corazón, tan solo una rendija, el amor te penetrará, te caldeará por dentro, te hará extasiarte, te hará gemir y suspirar, de belleza, de paz y tranquilidad.

El amor es un pájaro fiel, que cada mañana acude a tu puerta a picar en el cristal, te despierta con sus suaves trinos, y cuando menos lo esperas, abre sus alas, y en un soplo, se instala y hace su nido en tu corazón.

El amor es un pájaro fiel, que acude siempre a su cita, incluso aunque tú te olvides. Él seguirá acudiendo, y te esperará, brillante y tranquilo. Sabe que un día acudirás. Si no es el martes será el jueves.

El amor canta, aunque puede que no lo oigas, si estás dormido.
Pero tras el velo de tus sueños, tu corazón lo escuchará, y tú te acostumbrarás a su sonido, a su canto y a sus trinos. Y un día, cuando más lo necesites, tú serás de pronto el pájaro, te pondrás a cantar, o tu corazón lo hará por ti, y tú serás esos trinos.

El Amor brilla, incluso cuando no le dejas, nada puede impedirle brillar. No puede impedirte a ti mirar para otro lado.

El Amor es un pájaro fiel, que a cada sonrisa se hace más hermoso, más vibrante, más dulce al corazón. El Amor es un abrazo, de plumas blandas y reconfortantes, que te da descanso si lo necesitas, hermosura si abres la Primavera, y magia si te quedas a vivir con ella.

Que el Amor, pájaro fiel, canta hoy para ti, su más hermosa canción eterna.

D/A