Ahora has venido ante el trono de Dios, sin reverencia, has llegado alterado, porque piensas que tus oraciones no son contestadas.
Tu paciencia llego al final, porque te encuentras en un camino sin salida, ya no tienes peticiones que hacer, porque las has hecho todas; ya no tienes agradecimientos que dar, porque no recibes nada. Sientes que tu ser se desvanece y que tu corazon se desintegra poco a poco.
Quieres decirle a Dios que estas arrepentido de haber nacido, y que tu vida ha sido una desgracia, porque todo lo que has intentado, aun consultandolo con El, salio torcido, nada prospero en tu vida, y unicamente observas desolacion, espinas y plantas secas en tu camino.
Ahora has venido ante el trono de Dios, sin reverencia, pero no fuiste "fulminado" por El, porque te ama, aun asi, con todas tus rabietas y reclamos. El te ha tolerado porque te ama, El mismo fue quien te torcio el camino, quien hizo arder el fuego del horno de tu afliccion, y ahora, Dios mismo te consolara, en lugar de castigarte por tu irreverencia, te llamara cerca de El, te abrazara, te cuidara como a un niño; pondra tu espiritu, alma y cuerpo atribulado y confundido en orden, te dara su paz y comenzaras a ver las cosas distintas, no unicaamente porque lo pienses, sino porque veras cosas nuevas a tu favor.
Las circunstancias buenas vendran a ti, la ayuda vendra desde diversos lugares. Tambien podras darte cuenta que un reloj maravilloso esta controlando todo, porque varias cosas grandes se daran cita para tu beneficio.
Dios cambiara tu camino torcido, por un camino recto y sabio, tu etapa de mendigo sera cambiada a una etapa de principe o princesa, pero podras valorar grandemente aquella escuela, que a pesar de haber sido dolorosa, te condujo a una posicion gloriosa.