* Sin perdida de tiempo alguno ante la solicitud de arribar a tierras italianas, Shaina finalmente desemboca en aquellos lares que se vislumbran amenazados por la presencia oscura propia de los siervos de Hades en son de impartir su voluntad sobre la inofensiva humanidad residente de la nombrada zona.  Sin embargo, pese a la advertencia impartida en Grecia, los orbes de la amazona pareciesen contemplar todo lo contrario a una escena caótica y descontrolada, siendo las ruinas pertenecientes a la cultura románica un espacio de completo silencio y vacío, anulando cualquier tipo de amenaza instantánea… -Que extraño- murmura la peliverde, analizando el espacio a su alrededor sin dejar pasar detalle por alto, pues pese a la paz que se visualiza nada es de completa confianza para ésta, que después de todo piensa que no ha sido enviada por ordenes superiores a las tierras italianas en vano.  Así es que con cautela la fémina continúa con su expedición bajo el cielo vespertino de aquellos lares extranjeros, esperando lo previsto; la inevitable sorpresa enemiga. *