ADIÓS, MAMÁ CHEPINA
(La “Cuchi Cuchis”)
I
Alegre el marinero
Con voz pausada canta,
Y el ancla ya levanta
Con extraño rumor.
La nave va en los mares
Botando cual pelota.
Adiós, mamá Chepina;
Adiós, mi tierno amor.
II
De la remota playa
Te mira con tristeza
La estúpida nobleza
Del mocho y del traidor.
En lo hondo de su pecho
Ya sienten su derrota.
Adiós, mamá Chepina;
Adiós, mi tierno amor.
III
Acábense en los Pinos
Tertulias, juegos, bailes,
Agítense los curas
En fuerza de dolor.
La chusma de las cruces
Gritando se alborota.
Adiós, mamá Chepina;
Adiós, mi tierno amor.
IV
Murmuran sordamente
Los tristes Legionarios,
Lloran los Arzobispos
Y las damas de honor.
El triste Cuchi Cuchis
Canta con lira rota:
Adiós, mamá Chepina;
Adiós, mi tierno amor.
V
Y en tanto los traidores
Que ya cantan victoria,
Guardando tu memoria
Sin miedo ni rencor,
Dicen mientras el viento
Tu embarcación azota;
Adiós mama Chepina
Adiós, mi tierno amor.
LA MUERTE DEL TIRANO
(Enano Etílico)
Herido está de muerte, vacilante
Y con el paso torpe y mal seguro
Apoyo busca en el cercano muro
Pero antes se desploma palpitante.
El que en rico palacio deslumbrante
Manchó el ambiente con su aliento impuro,
De ajeno hogar en el recinto oscuro
La negra eternidad mira delante.
Se extiende sin calor la corrompida
Y negra sangre que en el seno vierte
de sus cárdenos labios la ancha herida,
y el mundo dice al contemplarte inerte:
"Escarnio a la virtud era su vida:
vindicta del derecho fue su muerte".
Con perdón del:
Lic. Vicente Riva Palacio
Torreón, Coahuila, México 1º de julio del 2012