No todo en Logia es como usted cree

Habitualmente dos masones en particular tomaban la tribuna de cierta Logia, uno de ellos era considerado por la mayoría como  un buen orador mientras que el otro lo consideraban un orador  mediocre. 

Así trascurrían las sesiones masónicas,  entre el para la mayoría  excelente conferencista y el para algunos  mediocre disertante masón.  Y era cuando el buen orador  Jerry usaba la tribuna era el deleite de esa tan concurrida Logia Masónica,  Jerry Edwin el Masón era un hábil conferenciante que arrancaba aplausos de sus atentos oyentes, que le interrumpían constantemente  con vítores y aclamaciones, y era que de cuando en cuando Jerry apuntalaba su conferencia con alguna anécdota increíble  , algún chiste  y hasta alguna que otra mala palabra impropia de decirla en un Templo Masónico, pero esto le era perdonado por sus hermanos masones, pues lo consideraban le ponía algo picante a su exposición.  Pero por otro lado Santiago Moriles era un masón sin muchas aclamaciones y los escasos  aplausos que al final se le brindaban era  más bien como un gesto de conmiseración de parte de sus hermanos masones.      Incluso al francmasón Santiago Moriles a sus espaldas se le criticaba duramente, y se le señalaba por la mayoría de los masones de  ser un tonto.  Pero existía un sector de los masones que veían en el francmasón  Santiago Moriles a un masón fuera de serie a un superdotado, eso confundía mucho a los masones que no veían en el Hermano masón Moriles nada digamos  extraordinario.

Los masones afines a  Santiago Moriles nunca lo defendían, solamente callaban y observaban atentos. Y ustedes bien pueden adivinar los masones partidarios de Santiago Moriles eran masones de la Vieja Guardia, masones ya con décadas en la cátedra masónica, exacto los clásicos  masones ya viejos.

Así , un día un joven masón luego de la Tenida y ya en pleno ágape masónico, se acerca a un viejo masón y comienzan a comentar de un asunto y de otro, hasta que el  joven masón con una amplia sonrisa comenta que estaba muy impresionado por lo excelente que habló esa noche de Tenida  el francmasón Jerry Edwin; entonces el viejo masón le preguntó al joven qué había aprendido de lo dicho por Jerry Edwin, el joven se quedó pensando titubeante  y no pudo decir nada en cuanto a algún aprendizaje, incluso el joven masón llevándose las manos a la cabeza  admitió no recordar de que había hablado Jerry Edwin en la Tenida.  En esa misma Tenida el francmasón Santiago Moriles también había expuesto un tema en Logia, y el viejo masón le preguntó sobre lo expresado por Santiago Moriles, y el joven masón dijo había captado de Santiago Moriles  una buena enseñanza y admitió recordar todo, incluso poder repetir parte por parte lo dicho por Santiago Moriles aquella noche de Tenida, y eso que la exposición habría durado  más de 10 minutos.

Entonces el viejo masón, le dice al joven masón aquella noche de ágape, algo que su alma  jamás olvidaría:

Mi joven hermano,  nuestro  Jerry Edwin, es un muy hábil orador sin duda, pero sólo es capaz  de tocar las cuerdas de las emociones  superficiales, y como todo lo que es emocional es efímero, y sus palabras no llegan al intelecto superior. Por otro lado Santiago le habla a nuestro Intelecto, y como todo algo intelectual es permanente y jamás se olvida, y nuestro hermano Santiago Moriles es un hábil expositor de ideas masónicas superiores, y por lo tanto evita lo emocional o pasional, porque sabe que si toca lo emocional su mensaje se perdería y se tiraría luego a la basura. Mi joven hermano masón, esa es la idea de todo, ahí está la música de moda , que pasa luego de unas semanas y llega otra canción más de moda; pero hay música real , música clásica que dura para le eternidad. Esto pasa con la literatura, el Cine, las ideas políticas emocionales y otras ideas políticas que dejan una marca permanente, que como todo, lo que  se basa en Modas es efímero, igual hay literatura barata y literatura que perdurara siglos y siglos, y debemos reconocer que también hay masonería que solo es de Moda y Masonería auténticamente perdurable.    

A todo esto dicho, el joven masón quedó un tanto pasmado, y luego de un momento de silencio, le dice al viejo masón , - ahora es que comprendo todo,  y la Masonería es esto , la Real Masonería que es por ello perdurable, mientras nosotros los masones sin experiencia nos dejamos arrastrar por pasiones pasajeras.

A lo que el viejo masón añadió, mi hermano con esto no quiero decir que los Jerrys en masonería no sean necesarios, son el contraste necesario para que  los masones Moriles existan y es que de ambos y de otras necesarias  tipologías de masones siempre los habrá en Logias.

Alcoseri