La Logia Masónica de los buenos y la
de los malvados
Cuenta una leyenda popular masónica quedos
jóvenes masones llegaron de un lejano Oriente, pero cada cual
por su cuenta y por separado, y pretendieron asistir
a la Logia de esa Ciudad que visitaban , y el primero de ellos acercándose a un
anciano masón que estaba justo en la puerta, le preguntó:
- ¿Qué clase de Masones hay en esta
Logia?
- Espera Hermano, deja te hago otra
pregunta, por favor, ¿Qué clase de
Masones hay en el Oriente de dónde provienes? - preguntó a su vez el anciano
masón.
- Oh, un grupo de masones egoístas , orgullosos y malvados- respondió
el Joven Masón- y añadió: Me alegro de estar fuera de allí al menos por unos
días y venir a iluminarme con vuestras luces.
- Lo mismo usted mi joven hermano encontrará
aquí el anciano respondió, es lamentable pero así es, esta es una Logia es de
masones malvados, egoístas y vanidosos.
Justo ese mismo día, el otro joven masón llego de ese
mismo lejano Oriente y pidió ser retejando para poder asistir a la Tenida de
esa Noche, y al ver que el anciano masón a las puertas del Templo fue que le preguntó:
- ¿Qué clase de Masones asisten aquí
a esta Logia?
El experimentado viejo masón respondió a su vez con la misma pregunta: - ¿Qué tipo de masones
son los que conforman tu Logia?
El joven masón respondió: -
¡Vaya! Mi Logia es un magnífico grupo de
masones, todos amables, honestos, hospitalarios. Yo estoy muy triste estar por ahora lejos de ellos.
- Igual los masones de esta logia son ambles, fraternos , humildes y claro muy
tolerantes - respondió el anciano masón.
Un Masón que había oído ambas
conversaciones preguntó al anciano masón:
- ¿Cómo es posible mi hermano responder
de manera diferente a la misma pregunta?
A lo que el anciano masón respondió:
- Cada masón lleva en su corazón el
bien o el mal y depende de su corazón es que verán a su entorno y a los demás.
Quien no encontró nada bueno en su propia Logia, no podrá encontrar nada bueno aquí en Nuestra Logia. Usted a donde
vaya encontrará un espejo donde se reflejará a usted mismo, porque, de hecho vemos en los
demás lo que nosotros somos, y nuestra actitud mental es la única cosa en
nuestra vida en la que podemos mantener el control absoluto.
Alcoseri