ALGDGADU
STU
VM y QQHH
Masonería Pública
«Es más fácil desintegrar un átomo, que un prejuicio.»
Albert Einstein
Entre nosotros los Masones, muy pocos entendemos estos preceptos, pues generalmente, estamos más interesados en ver qué sacamos de provecho de nuestra Augusta Institución, que en demostrar con hechos, cuan Grande es la Obra que estamos destinados a realizar. Pero eso es normal; como en todo en la vida, existen los buenos y los malos; y no me malinterpreten, buenos y malos, en el sentido laboral y en el sentido de compromiso, y no en el de bondad y maldad como cristianamente conocemos.
.
Según Sócrates, «los conocimientos correctos conducen a acciones correctas». Él pensaba que si alguien tenía malas acciones, era debido a su poca instrucción o su falta de conocimiento. Por eso recomendaba al ser humano, aumentar sus conocimientos en toda oportunidad. La Masonería nos da esa opción. Por su razón de ser, la Masonería no permite el estancamiento ni el ostracismo; muy por el contrario, promueve el progreso individual y por ende, el progreso del grupo.
Esta búsqueda de conocimiento, muchos las hemos tergiversado, convirtiéndonos en sofistas soberbios, que nos vanagloriamos de lo mucho que según nosotros sabemos, pregonándolo así a los cuatro vientos. Sócrates, que fue un recalcitrante opositor de los sofistas, afirmaba que , «más sabio es quien sabe que no sabe nada o todo». Según Platón, a Sócrates le molestaba mucho el hecho de no saberlo todo. Sócrates nunca se considero un aprendiz de tiempo completo, lo que muchos en nuestra sociedad Masónica confundimos a menudo. Sócrates nunca temió compartir lo que sabía.
Cuentan que un día le preguntaron al Oráculo de Delfos, quién era la persona más sabia del mundo, a lo que el Oráculo respondió que lo era Sócrates. Sorprendido por esta respuesta, quiso averiguarlo. En su momento, cuestionó a uno de los sofistas (1) más renombrados de su tiempo, y que para su gusto, era la persona más sabia. Al terminar su conversación, se dio cuenta cual era la verdad. Muy a menudo escuchamos a HH escudarse detrás de la palabra Aprendiz, y del dicho, «nunca dejamos de aprender», maquillando con esto, nuestra vasta ignorancia. Todos tenemos algo que aportar y algo que compartir.
La experiencia es una de esas cosas que todos recibimos con el tiempo, pero que muy pocos compartimos. ¿Cuándo dejaremos de ser eternos Aprendices? Solo individualmente podremos contestar esa pregunta. Seamos filósofos (2) , no sofistas, que nos creemos los seres más sapientes del Universo, cuando en realidad nuestra ignorancia es tan vasta como ellos mismos. Ser filósofo significa que buscamos obtener más conocimiento, pues sentimos «Amor por la Sabiduría»; además de que en realidad sabemos muy poco, y que reconocemos que hay un montón de cosas que no entendemos. La constante búsqueda de conocimiento, el estudio de la filosofía y en particular de la moral, son el principal catalizador que provocarán los cambios individuales y grupales que tanto necesita el mundo, y la Masonería Universal.
Nunca hablemos de nada que no entendamos, esta es una prerrogativa predominante cuando trabajamos en Logia los Masones. Esto implica saber escuchar con atención las disertaciones de los otros HH, para así externar una opinión adecuada, y evitar las opiniones fuera de contexto. Por eso es que los Masones somos considerados por la humanidad, como hombres de crítica pro-positiva.
Pero hay que hacerlo valer, y eso solo se dará, en función de lo que aportemos a la misma humanidad en general. Pues de nada sirve todo lo que logremos aprender dentro de nuestras logias, si no exteriorizamos absolutamente nada.
Parafraseando a los QQHH Terrones Benítez 32° y León García 33°, en su libro “Los 33 Temas del Aprendiz Masón” , podemos confirmarlo: «…la mejor manera de demostrar que somos útiles a la sociedad, es dando el mejor ejemplo de moralidad, dinamismo y laboriosidad, como virtudes propias dentro de los templos masónicos; solo así, el mundo podrá distinguirnos y calificarnos; solo así, demostraremos que supimos estudiar para aprender; que supimos trabajar para ser útiles; que sabemos aconsejar para guiar a nuestros semejantes por la senda del conocimiento llevando siempre como lema, nuestros ideales de Libertad, Igualdad y Fraternidad; como única ambición tenemos, la Universalidad; y como arma de combate, la sabiduría». El que tenga oídos, que escuche.
Si nosotros, los Masones, tuviéramos la mala fortuna de encontrarnos con algún individuo con estas características, y que además, se diga Masón, solo recordemos lo siguiente: que cuando hablamos de masonería, «...ni estamos todos los que somos, ni somos todos los que estamos».
Notas:
(1) Sofista: En la Grecia antigua, el que se dedicaba a la enseñanza de la filosofía.
(2) Filosofía: Intento del espíritu humano de establecer una concepción racional del Universo mediante la autorreflexión sobre sus propias funciones valorativas, teóricas y prácticas. Sistema filosófico: la Filosofía de Platón. Cuerpo sistemático de los primeros principios y de los conceptos generales de una determinada ciencia: Filosofía del derecho, Filosofía de la historia. Facultad destinada en las universidades a la ampliación de estos conocimientos.
FRATERNALMENTE
Luis Juan Muñoz Lamoneda MM
GrOr de Torreón, Coahuila 2012 ev