3. */intuición metafísica/*
Todavía hablamos de intuición metafísica. En su forma más simple, es la que nos da la certeza de ser. Es metafísica en cuanto que sienta los cimientos mismos de esa tan denostada rama de la filosofía que es la ontología, es decir, el discurso sobre lo que es el ser de una cosa, sobre la relación del sujeto reflexivo con el objeto percibido. Si cuestionamos esta certeza de ser que nos da la intuición metafísica, actuamos como filósofos, redescubrimos nuestra ipseidad o mismidad. como lo hizo Descartes en sus famosas Meditaciones.
4. */la intuición adivinatoria /*
De ahí pasamos a la intuición adivinatoria , la que obra constantemente en nosotros pero no siempre nos damos cuenta. Conociendo el estado actual de las cosas y la propensión de las cosas a cambiar, nuestra intuición divina tiende a advertirnos de las probabilidades del estado futuro. Algunos afirman poseer esta facultad a un nivel excepcional y ser videntes o adivinos. Videntes, dicen percibir en el presente lo que determinará el futuro. Adivinadores, se jactan de utilizar analogías para predecir destinos, como las cartas o el tarot, los fondos de tazas de café o leer el agua , los puntos de las casas de astrología o la posición de las estrellas en el zodíaco.
Más interesante es el lugar de la intuición adivinatoria en el campo de la creación artística o literaria. O en la música. Percibir una melodía es anticipar intuitivamente la nota llamada por la serie de notas que se acaban de enlazar.
5. */intuición retrospectiva/*
Finalmente, la fenomenología de la intuición reconoce la existencia de la intuición retrospectiva. Es aquello que, a partir de indicios dispares, permite reconstituir hechos pasados y determinar sus causas o sus autores.
2. Intuición retrospectiva: Resolviendo los acertijos
Cuando se nos ofrece un enigma, es una intuición retrospectiva la que ponemos en marcha para intentar resolverlo. Nuestra mente toma en cuenta una especie de inventario incompleto y trata de descubrir su coherencia. He aquí un enigma a resolver , es de cuando leemos una novela y vamos intuyendo su desenlace , o lo mismo cuando vemos una película.
# / El acertijo
Los niños y los primitivos siempre han amado los rompecabezas. Hoy en día, el enigma reina sobre todo en tres campos bien diferenciados: los crucigramas, las novelas policiacas y las enseñanzas de la masonería.
1. Crucigramas
Resulta es deslumbrantemente relevante lo que hay en los crucigramas: “ …lo que está en juego, tanto en los crucigramas como en el psicoanálisis, es esta especie de significado oculto, este “ inquietante extrañeza “ a través de la cual el inconsciente del lenguaje se infiltra y se revela ”. Cualquier buena definición debe ser tal que cuando descubrimos la palabra.
2. El enigma policial
Una novela de Agatha Christie está compuesta de tal manera que, alrededor de las dos terceras partes de su lectura, el lector tiene la sensación de que él mismo ha descubierto al asesino, antes que el detective que siempre pisotea la contradicción y la confusión de pistas. Sin embargo, el autor se esfuerza constantemente por engañar a la intuición. Los aficionados al género conocen el genial truco de Agatha Christie y saben que, con ella, el asesino es siempre el personaje en el que menos pensamos. El colmo de esta desconcertante técnica que hace todo el éxito de la gran dama, es " El asesinato de Roger Acroyd ", donde el asesino se revela en las últimas líneas como el autor mismo de la historia.
3. El acertijo del secreto masónico
Durante décadas los masones estamos por revelar cuál es el Secreto Masónico, algunos masones aseguran que el secreto masónico es que el secreto no existe, otros que se trata de un complot contra la Iglesia Católica , otros más que el Secreto masónico es la implementación del Nuevo Orden Mundial , otros que el secreto se revelará en el Grado 33º o que está oculto en el Tercer sublime grado de la Maestría Masónica, pero en realidad los masones lo vamos armando poco a poco para descubrirlo, así a partir del grado de aprendiz de masón , y que debes seguir un hilo sin perderlo desde ahí, si tal como el mito de Ariadna .
Por tanto la masonería también es enigmática. En sus cualidades de Orden progresista e iniciática, al igual que Agatha Christie, la Masonería trata de desviarnos con el oropel de los altos grados masónicos , de las lisonjas masónicas y los halagos mutuos , con los pomposos títulos como por ejemplo el de Ilustrísimo , poderosísimo , y así de asegurarnos con confianza que nuestra misión va en esa dirección , pero ahí no hay nada , y luego de enviarnos de regreso a nuestro punto de partida ofreciéndonos otra ruta más directa. Desde el principio nos presenta al menos dos enigmas.
1. * “ ¿ De dónde Venís y Qué venimos a hacer en la Logia? »*
El primero de estos enigmas se nos ofrece bajo la fórmula “ ¿Qué venimos a hacer en la Logia? ". En verdad, es un enigma porque, para responder a esta pregunta, debemos reunir los elementos dispersos de lo que ya hemos hecho allí y tratar de darle a todo una unidad categórica. Todos conocemos la respuesta ritual a esta cuestión de retejar al ingresar a una logia, una fórmula que debemos memorizar , pero también sabemos que esta respuesta es tan enigmática como la pregunta, pero ¿qué es vencer las propias pasiones y guardar silencio , qué es someter la voluntad y, finalmente, que es hacer levantar templos a la Virtud, si no para seguir un proceso cuya importancia conocemos pero cuyo significado se nos escapa.
2. * " ¿Cuál es nuestro Secreto?" »*
El otro enigma es el del Secreto de la Masonería. Ya ha respuestas perentorias, incluida esta, que personalmente rechazo: como les explicaba muchos masones aseguran que “ El secreto de la masonería es que no tiene secretos ”. Pero el catecismo masónico dice que si existe y que está en la Naturaleza y se conserva hasta el día de hoy tan puro y sin mancha como hace milenios. Y lo más enigmático es que se dice ahí mismo que con el Secreto Masónico se dominara a las mentes de los seres humanos y a las cosas.
Se han hecho muchos discursos dentro y fuera de logias sobre esta cuestión del Secreto, y todos estamos embriagados por la prudencia y la imprudencia de estos discursos, que tienden a hacer nada menos que despejarnos de los ojos del mundo profano. Estos son comentarios exotéricos, de disculpa, que quieren tranquilizar pero no explican. No intentaré demostrar que la Francmasonería tiene un secreto terrible que si se conociera templarían los tiranos, pero no tan terrible para los buenos seres humanos , el secreto es
un proceso, una receta, un medio, que oculta incluso a sus seguidores y que explica su misterioso poder.
# El misterio
Ya hemos visto que la Masonería era enigmática. Constantemente pone a trabajar nuestra intuición retrospectiva. Acabo de afirmar que la Masonería era secreta, no sólo porque está en una posición estratégica constante de disimulo, sino sobre todo porque posee un Secreto. Todo esto se explica por el hecho de que, sobre todo, la masonería es misteriosa.
Ella es, en opinión unánime, la honorable heredera de las antiguas sociedades del misterio. Podemos estar de acuerdo con esta opinión, que solo compromete nuestro sentido crítico de la historia. Pero además, ella misma es un misterio. Ha estado operando durante siglos con el mismo éxito asombroso, a pesar de sus adversas circunstancias, sus angustias, sus reveses, los malos masones y sus defectos visibles. Considerando todas las cosas, me dije a mí mismo que primero deberíamos hablar sobre este misterio antes de buscar el Secreto que se guarda .
1. Enigma y Misterio: distinción.
Entre enigma y misterio existe una evidente relación semántica. Puedo decir “ La Bolsa de Valores es un enigma para mí ” o “ La Bolsa de Valores es un misterio para mí ”, y todos habrán entendido que no sé nada sobre el mercado de valores.
Pero aquí, en Logia, no podemos conformarnos con un disfuncional escándalo filosófico , debemos poner pericia en los términos que usamos y no flotar entre la exterioridad del enigma y la interioridad del misterio. En ambos casos, hay un obstáculo mental.
"El acertijo". /
“ El _problema_ es algo que encontramos, que bloquea el camino. Él está completamente frente a mí. Por el contrario, el _misterio_ es algo en lo que me encuentro comprometido, cuya esencia, por consiguiente, no debe estar del todo delante de mí .
Lo pondré simplemente así. Ante un enigma, siento que el obstáculo está en el enigma. Ante un misterio, siento que el obstáculo está dentro de mí.
Agregaría que el misterio tiene el don de impresionarnos . En esto participa de la vida espiritual y de la naturaleza de lo sagrado, si hemos que, a partir de lo numinoso surgen los sentimientos del espanto ante lo sagrado: el mysterium tremendum ante la maiestas augusta que emana del enorme poder del Ser supremo; el temor religioso ante el mysterium fascinans que despliega la energía y plenitud perfecta del ser.. Lo sagrado y lo sublime se unen en este personaje fulgurante.
2. El Gran misterio de la masonería
Es en sí mismo que debemos buscar de qué manera la Masonería es misteriosa. El misterio de la masonería radica en que responde a la demanda de una zona hasta ahora insatisfecha del espíritu humano. Sacia en nosotros esa sed de lo desconocido . Desde el mismo comienzo en que fui iniciado me asombró por la importancia de los efectos que produce en nosotros el trabajo masónico, en vista de su aparente ostensible futilidad y hasta del fingido absurdo de su hasta infantil juego masónico . Para que ella pueda mantener este misterio, necesariamente debe tener un Secreto. Y es que el secreto masónico se esconde tras mil velos entre ellos , cosas absurdas como decirnos que tenemos 3 años y que los trabajos comienzan y terminan a unas horas que no corresponde a nuestros habituales relojes.
# El secreto
Hemos llegado a nuestro tema. Quedan tres cuestiones por resolver. ¿Estamos seguros de la existencia del Secreto, cuál es su origen y en qué consiste?
1. Certeza del secreto
La razón por la que estoy seguro de que el Secreto Masónico existe es que es precisamente el objeto de nuestro enigma y se deduce de nuestro misterio. Lo que nuestro método es iniciático, comparable en esto al método hermético, es que nos pone en un camino, llamado Real, al final del cual se ha de descubrir el Secreto. La prueba de que el Secreto existe es que el misterio no persistiría si no hubiera nada que buscar, así como sin la materia prima no habría Gran Obra.
2. Fuente del secreto
En cuanto a la fuente de este secreto masónico , tengo las mayores dudas y de las certezas a la vez. Puedo y a la vez “No puedo” creer que un maestro masón genio lo haya puesto en nuestro camino de manera fácil de resolver. Como los grandes misterios de la vida, ha quedado atrapada en nuestro sistema en virtud de la ley de la evolución, sólo puede ser fruto del azar y la necesidad.
3. Objeto del Secreto
Si ahora queremos ponernos en busca de nuestro Secreto, de nada sirve abarcar toda la extensión del espacio masónico. Para encontrar la clave efectiva del enigma, debemos ponernos, por empatía, en el lugar de quien ocultó el objeto codiciado.
Si fuéramos el maestro genio que diseñó nuestro Secreto, ¿dónde lo colocaríamos para que conserve toda su eficacia y escape a nuestra tonta curiosidad? Por supuesto, en el mismo ritual de recepción de los laicos o profanos . Esto responde al dicho de que toda la sustancia de la Masonería está contenida en la Iniciación en el primer grado.
¿En qué parte del ritual colocaríamos un objeto tan precioso, para que permanezca siempre visible y, sin embargo, siempre desapercibido? Obviamente, entre el estudio de las páginas de la liturgia del Primer grado y en el catecismo de aprendiz y en la puerta que se nos abre , donde nadie volverá a ver.
# El Despojo de los Metales
Tú entiendes. Nuestro Secreto está enclavado en el tradicional e incomprensible gesto del despojo de los metales .
1. *Enigma de Despojo de los metales viles.*
P.- ¿Qué exigió de vos?
R.- Que le dijiste mis generales, luego me vendó los ojos, me hizo bajar a las catacumbas y escribir, a la luz de una lámpara sepulcral, lo que pensaba de mis deberes hacia Dios, hacia mis semejantes y hacia mí mismo y poner mi última voluntad. Después me dejó ni desnudo ni vestido, aunque de un modo decente, me despojo dde todos mis metales y alhajas y me llevó a la puerta del Temp.·. con una cuerda al cuello.
P.-¿Por qué el Exp.·. os sepultó en las entrañas de la tierra y luego os puso ni desnudo ni Vestido y os despojó de los metales y alhajas?
R.- Porque el iniciarme debía morir para el vicio, los errores y las preocupaciones y vivir sólo para la Virtud y para que eternamente me acordara que se me había admitido por ser hombre virtuoso o mujer virtuosa ; así debía yo socorrer física y moralmente al que viere en la miseria, pues la filantropía es una cualidad inseparable del Masón; para él nada valen las riquezas comparadas a l honor; los metales y prendas engalanan a los vicios y, por eso, los sacerdotes del Egipto, antes de sacrificar, se despojan de las sortijas y demás adornos de oro y plata.
Sobre todo, el despojo de metales es un enigma. ¿Cómo responder a la pregunta: "¿Por qué, antes de hacer los últimos tres viajes, fuiste despojado de tus metales?" », si no una de esas banalidades que se encuentran en todos los manuales de Masonería, del estilo « para presentarme puro en la Iniciación ».
2. *Misterio del despojo de los metales .*
El despojo de metales también es un misterio. Es innegable que participamos en su realización no sólo para sacrificarnos por lo que se impone a nuestros ojos como una tradición respetable ni para someternos a la voluntad de nuestros Iniciadores sino porque sentimos muy confusamente que responde a una necesidad. Algo en nosotros, sin embargo, se interpone en el camino de este gesto: nuestros hábitos mentales y nuestro apego a lo que nos pertenece luchan con nuestra adhesión al sacrificio momentáneo de nuestro derecho a la propiedad. La reducción de los metales presenta, por tanto, todas las características de lo insólito que no está del todo ante mí, es decir, todas las características del misterio.
3. *Secreto de despojo de los metales*
Por último, el despojo de metales es nuestro secreto. He venido todo este tiempo para llegar aquí. Estamos en el corazón del tema. Si no hubiera tomado este desvío, sé que las cosas que les voy a decir ahora les hubieran parecido incongruentes y probablemente inaceptables. El despojo de metales encierra el secreto de la felicidad masónica. Si nos tomamos el tiempo y la molestia de invertir todas nuestras fuerzas espirituales o, para hablar en un lenguaje menos colorido, todas nuestras facultades mentales, en el acto de despojarnos totalmente de nuestros metales, lograremos la autorrealización total, es decir, llegar a ser quienes somos y no quienes creemos ser o queremos ser, llegar a ser todo lo que somos capaces de llegar a ser.
" Cualquier portador de metales capta sin saberlo ondas electromagnéticas". Está en todo momento sujeto a influencias que no percibe y, a fortiori o 'con mayor motivo', que no controla ” el despojo de metales nos quita la influencia mercurial y constituye la primera purificación.
Sé que en cada Logia hay por lo menos un hermano masón buscador de enigmas convencido, que tras la literalidad de nuestras liturgias se encuentran otros mensajes ocultos, a los que la mayoría de los hermanos masones pasan por alto . Entonces, citemos a KG Jung. Cree que los metales se han asimilado a la libido: su carácter subterráneo los hace similares al deseo sexual.
En la masonería en muchas logias el despojo de metales cayó en desuso. El rito dedica mucho cuidado a la preparación del candidato, insiste mucho en el hecho de que debe presentarse a la Iniciación “ ni desnudo ni vestido ”, ni desnudo ni vestido. Los hermanos practicantes del rito de la Emulación, incluso, obligan al destinatario a desnudarse por completo y ponerse una especie de pijama. Pero ya no hablan de los cuatro elementos ni de los metales con tanta insistencia como la Masonería del Rito Escoces Antiguo y Aceptado .
También hay que decir que muchas de nuestras Logias simbólicas han abandonado el gesto iniciático y ya no se refieren al despojo de metales sino como una metáfora conveniente, como una invitación a la ascesis social. En algunas logias masónicas del Estado de Nuevo León México y creo en otras logias mexicanas, se realizan iniciaciones exprés , acortadas y sintetizadas , que duran apenas 15 o 20 minutos y no ponen énfasis en despojar de los metales.
Por lo tanto, me comportaré como un hereje, me distanciaré por completo de la opinión clásica e intentaré mostrarles que contar no es un gesto simbólico, sino un acto real, que no es de orden moral, sino de esencia psicológica, que es ni siquiera un deber masónico sino una gracia concedida a quien pone toda su alma en realizarla.
El despojo de los metales, que tradicionalmente se hace entre bambalinas, frente a unos pocos testigos, en el intervalo que separa el gabinete de reflexión, no es un gesto simbólico. En cualquier caso, si los preparadores actúan en conciencia, realmente despojan al recipiente de todos sus metales, sin excepción. Admitiremos que nuestro vocabulario extiende el significado de la palabra "metales" a cualquier cosa que los represente, y que todo el contenido de la billetera o monedero, incluso si es papel moneda, está incluido en la requisición. El propio destinatario colabora en el decomiso, llama la atención de los preparadores sobre objetos que podrían haber omitido y entonces sabe que es urgente e importante que nada se interponga entre lo que es y lo que será.
Porque el verdadero efecto de este despojo de metales es llevarnos al estado de seres puros, como en nosotros mismos, mientras que si no se produjera, seríamos viajeros cargados de equipaje, sin saber si estamos pasando la concesión por lo que somos y no por lo que tenemos. Este despojo de metales produce un efecto psicológico en el que se encuentra en proceso de ser iniciado.
Será necesario, que este despojo se consumara, para que pasemos de la condición de tenerlo al estado de ser.
Este acto, que realizamos por primera vez cuando todavía estábamos en la oscuridad, se supone que debemos repetirlo al menos en el pensamiento cada vez que entramos al Templo. Se dice, según nuestros hábitos de repetir lo que hemos aprendido, que despojado de sus metales, el masón renuncia a todo lo que le une a las posesiones terrenales tanto como a los méritos profanos.
Si esto fuera así, el ascetismo sería demasiado fácil y no merecería ninguna mención. La acción mental de desnudez debe por el contrario profundizar, ampliar, llegar a los puntos más dolorosos de resistencia, y llevarnos, paso a paso, a la ausencia de todo *deseo* de ser.
Los invito a considerar con toda su lucidez que hay un mundo entre el _ser_, en toda la fuerza natural del propio ser, y el _querer ser_, cultivando en uno mismo el deseo insatisfecho de ser reconocido como tal, lo que supone que en el fondo algo permanece irreal, imaginario, inexistente. En definitiva, el deseo de ser no debe confundirse con la sincera aceptación de uno mismo.
El contenido psicológico
Esta primera reflexión tiene el mérito de indicarnos, evidentemente, que hemos salido definitivamente del terreno de la moralidad cristiana donde tantos de nuestros masones antecesores habían confinado el proceso iniciático. Estamos justo en el corazón de la psicología profunda. En resumen, el despojo de metales es una invitación apremiante a ser más que a aparentar .
1. *Autorrealización*
La idea de la autorrealización y la necesidad de dejar ir todo deseo de aparecer me llegó con una evidencia deslumbrante cuando observaba a un atleta. Antes este atleta de desatar todo el poder de sus músculos como un torrente, lo vi estaba concentrado. En verdad, se despojó de sus metales. A la hora de empezar su hazaña , este atleta estaba totalmente realizado. Quiero pensar que en ese momento de su hazaña ya no tenía nombre, nacionalidad o vanidad personal, no recordaba si tenía alhajas o no . Se había convertido en realizar su proeza deportiva, y lo logró . Si por una sola fracción de segundo este atleta hubiera perturbado la armonía de su preparación al pensar en algo mundano no hubiera ganando una medalla, no digo que no hubiera pasado el listón, digo que hubiera perdió su valor simbólico.
De este poder creo que todos somos capaces, porque somos masones. Para nosotros, no se trata de batir un récord. Sólo se trata de llegar a ser todo lo que somos capaces de llegar a ser, es decir, de realizarnos a nosotros mismos.
2. *El Camino del Buda*
Les daré brevemente otro modelo, probablemente bien conocido por algunos de ustedes. Es la del Buda, la del budismo primitivo y original . Para este Buda, la felicidad del hombre está hecha del camino sagrado en ocho ramas que pasa por la fe pura, la voluntad pura, el lenguaje puro, la acción pura, los medios puros de existencia, la aplicación pura, la atención pura y la meditación pura.
Una vez más, es fácil malinterpretar, tomar las cosas al pie de la letra y dar a estas palabras un significado moral. Buda no está dando reglas de conducta sancionadas por aprobación o desaprobación. Se sitúa en el plano de la psicología del ser. La palabra "puro" no debe tomarse aquí en el sentido de " desprovisto de toda contaminación ", sino de "sin ninguna voluntad de ser distinguido".
¿Qué era la fe pura a los ojos de Buda? Era la adhesión confiada a la realidad, a la constancia de las leyes naturales, al ciclo de las estaciones, al destino de todo ser vivo destinado a pasar por el inevitable proceso de la vida, sin la esperanza particular de escapar a estas realidades y sobre todo sin invertir en esta fe la idea de que salva de cualquier cosa.
¿Qué es la acción pura? Es aquello que se hace sin otra intención que la de hacerlo, lejos de toda preocupación de ser recompensado por ello. ¿Qué es la atención pura? Significa que no hay concentración efectiva en el objeto observado si entra en el observador algún deseo de ser el observador.
3. *La sublimación del deseo de ser*
La idea rectora Masónica es esta. Se cruza en nuestro camino del deseo, es decir, el residuo de nuestra vida profana, el materialista que está en nosotros y al que nunca acabamos de dominar del todo.
La sabiduría masónica sería purgarnos de este pesado residuo, para realizarnos plenamente. Así, seremos una luz para la humanidad.
Al invitarnos a despojarnos de nuestros metales, lo que la masonería, en su lenguaje de misterio, nos insta a deshacernos, no son nuestros impulsos instintivos, nuestros impulsos naturales, nuestros reflejos salvadores. Si fuera así, sería grotesco y no sublime como deseamos. Lo que ella quiere de nosotros es que abandonemos todas nuestras neurosis y en particular nuestra poderosa neurosis del yo.
3. El secreto de la felicidad
El secreto de la felicidad masónica es el despojo de los Metales. Pero uno no se despoja de sus metales con un simple clic, uno no se realiza con una decisión repentina. La iniciación es un camino, no un bautismo. Solo somos masones porque los demás nos reconocen como tales. Por tanto, sólo en grupo alcanzaremos la cualidad de ser realizados. La autorrealización requiere un saber para ser probado. De todos los medios ideados por los hombres para elevar a los individuos que gozan de buena salud mental del estado del ser imaginario al estado del ser real, sigue siendo la Francmasonería la que ofrece el mejor rendimiento.
En la vida de cada masón, hay varias aventuras. El camino se transita con grandes alegrías y profundos dolores. Pero él está conduciendo a alguna parte. No es el laberinto en el que se pierden la mayoría de nuestros contemporáneos profanos y donde nos preguntamos por qué hemos vivido.
Esta profesión de optimismo no es circunstancial. Su permanencia se construye sobre una larga meditación y convicción.
Personalmente, me mantendré fiel a mi convicción Masónica de que es mediante el abandono sincero de sus metales que los masones encontrarán y preservarán la pura, la verdadera, la maravillosa felicidad masónica.
Alcoseri
2 comentarios
Hijo De Caim
Exelente!!! Trazado MQ.'. Vick Alcoseri
Responder1 d
Vick Alcoseri
Hijo De Caim Saludos Fraternos
Responder15 min
Vick Alcoseri