¿Qué son las planchas masónicas?
Lo primero; las planchas masónicas son trabajos normalmente escritos que intentan exponer una temática relacionada con la masonería; estos trabajos son presentados ante el pleno de la logia en la cámara que corresponda. Por ejemplo, el tema del mandil de aprendiz masón tendría que ser presentado en la primera cámara, mientras que el tema de la banda de maestro masón, se debe compartir en el tercer grado.
Así, las planchas masónicas tienen el objetivo de transmitir el contenido de nuestros conocimientos al resto de los hermanos de la logia. Constituyen una prueba de nuestro progreso dentro de la orden y normalmente son testigo de que estamos trabajando constantemente en adquirir conocimientos sobre la masonería.
Un dato: Algunas logias masónicas cambian el nombre de estos trabajos según el grado en el que se encuentra expuesto el mismo o el grado que ostenta el expositor. Por ejemplo, en segundo grado se les suele llamar “Burilados”, mientras que para el tercer grado reciben el nombre de “trazados”.
¿Qué no son las planchas masónicas?
Las planchas masónicas tienen el único objetivo de compartir con el resto de los hermanos el conocimiento y el progreso que se ha adquirido durante un periodo de tiempo. Su exposición dependerá del calendario de la logia, de la cantidad de trabajos que están pendientes de lectura y del número de hermanos que quieran leer su información.
Las planchas masónicas no tienen un formato preestablecido pero suelen tener una secuencia lógica para su comprensión.
Existen malas costumbres en torno a la elaboración de trabajos masónicos y su presentación en los talleres. Lamentablemente, un porcentaje de hermanos gustan de realizar plagios a trabajos que no han realizado sin dar el crédito a sus creadores.
En más de una ocasión hemos escuchado trabajos realizados en nuestro sitio web en logias masónicas. Y aunque nos da gusto saber que nuestra información es utilizada, nos encantaría que se le diera el crédito a quien se tomó la molestia de realizarlo.
De cualquier manera, las planchas masónicas no deberían contener estos elementos:
Contenido Plagiado y sin referencias de dónde se obtuvo la información.
Elementos provenientes de otras escuelas iniciáticas o corrientes del pensamiento ajenas a la masonería (salvo que sea la temática precisa del tema elegido).
Contenido de grados diversos al de la cámara donde se presentará el trabajo.
Elementos que no tengan que ver con la masonería.
Contenido que pueda resultar polémico, incómodo o soez.
Por último, señalar que la presentación de planchas masónicas no debe ser un aspecto sistemático y hasta obligatorio. Muchos hermanos presentan trabajos por presentarlos; esto sólo provoca la elaboración de contenido de baja calidad y que termina por recibir comentarios genéricos como: “Qué buen trabajo”, “un tema interesante” o “gracias por compartir”. Estos comentarios no abonan a la retroalimentación y generan un circulo vicioso de trabajos de pésima calidad.
Determinar el tema de la plancha masónica que vamos a exponer en Logia
Lo primero que hay que hacer para redactar un trabajo masónico de calidad es elegir el tema. No hay nada peor que una hoja en blanco para quienes gustan de la redacción. Para evitar esto, evita presentarte ante la computadora sin ideas. Te recomendamos realizar una lista de temas que te interesan o que desconoces y que quisieras explorar a fondo. Por ejemplo, si quieres saber sobre la piedra en bruto, el mandil del aprendiz masón o los viajes de la iniciación. Entonces elabora una lista y ve tachándola conforme elabores ese trabajo.
Algunas logias usan temarios preestablecidos para sus trabajos; estas herramientas suelen ser muy útiles al inicio; aunque al pasar de los meses y dependiendo de los gustos de cada hermano, podría no resultar tan atractivo realizar un trabajo sobre las doce columnas como sí lo sería un estudio comparado entre los signos del aprendiz en los diferentes sistemas masónicos del mundo.
Escoger el tema también determinará la fuente que se utilizará. Si tu trabajo está relacionado mayormente con simbología masónica, entonces quizá convenga utilizar más rituales que libros masónicos. Recuerda que los libros sobre masonería son mayormente interpretaciones que realizan los autores respecto de los propios rituales. A menudo estas interpretaciones pueden llegar a confundir más que el propio ritual. Así que si tu contenido es de corte simbólico, mejor hazte con dos o tres rituales de tu grado y realiza estudios comparados entre ellos para obtener tu propio criterio.
Si por el contrario tu tema es de corte histórico, entonces sí sería oportuno que leas documentos, obras y artículos que te den una visión sobre el contexto histórico que quieres estudiar en tu plancha. Si quieres más información sobre cómo elegir la fuente correcta, te recomendamos nuestro artículo: Liturgia o libros masónicos ¿Qué fuente es mejor?
¡No te pierdas nuestro artículo! Las principales frases masónicas y filosóficas que debes conocer
¿Dónde buscar información para las planchas masónicas?
Una de las principales dudas que surgen cuando se está elaborando un trabajo masónico es dónde encontrar la información. Esto nos lleva invariablemente a la búsqueda en internet o a la compra desmedida de libros sobre masonería. Y, aunque ninguna de estas actividades está mal, hay que saber escoger a conciencia.
La mayoría de los textos que se exponen en internet suelen ser refritos de otras publicaciones y hasta contienen signos, tocamientos, medios de reconocimiento y demás aspectos que sí son de discreción absoluta en la orden. Este tipo de sitios no gozan de buena reputación entre los hermanos masones que gustan de la elaboración de trabajos de calidad.
¿Cómo elegir entre información valiosa y no valiosa para las planchas masónicas?
De cualquier manera, te podemos hacer algunas recomendaciones para la búsqueda de información valiosa:
El ritual. No hay mejor fuente para estudiar masonería que el ritual mismo.
Libros de autores masónicos con probada trayectoria dentro de la orden. Preferentemente, elige autores que tengan grados en más de un rito masónico, usualmente son los que tienen una apertura más grande respecto de los contenidos de la orden.
Huye de sitios web que carezcan de rigor editorial. Nuestro sitio es revisado por un grupo multidisciplinario de maestros masones. Además, no compartimos datos sobre signos, medios de reconocimiento y demás; por estas razones nuestro sitio es seguro para utilizar como referencia.
Aprende a discriminar entre información valiosa e inventos. No toda la información que anda circulando por ahí es cierta. Algunos charlatanes venden a la masonería como una escuela de misticismo y magia.
Importante: Recuerda que la masonería es una institución creada por personas que intentan realizar un crecimiento personal y espiritual a partir del perfeccionamiento propio y colectivo; la masonería es orden, ritual y cadencia, no superchería, conspiración y magia.
Leer la información completa antes de utilizarla
Uno de los puntos críticos en la elaboración de un trabajo sobre masonería es la lectura del material elegido. Una vez que tenemos el tema definido y tenemos escogida la fuente ideal para el mismo, llegó el momento de leer todo.
A veces omitimos este paso por pereza, pero no hay nada peor que copiar un contenido que no hemos leído y presentarlo a la logia; esto puede traer como consecuencia una lectura deficiente por estar leyendo por primera vez y hasta la presentación de un contenido que no es del grado que se está trabajando.
La información que ronda en internet es muy variada y puede estar llena de imprecisiones. El consejo es que realices una labor de “curado” de la información. Esto es, leer, detectar los posibles errores, contrastar los datos que no parecen muy consistentes con otras fuentes y finalmente ajustar el texto para darle el cuerpo y toque personales.
Esto es como una receta de cocina, no es igual ver la receta en internet y copiarla tal cual, pues es necesario darle el toque personal para que esta quede como a nosotros nos gusta. Este tipo de labores son la diferencia clave entre un trabajo que parece fusilado de internet y uno que está realizado con cuidado. Con el tiempo y algo de práctica verás que preferirás más realizar tu propia redacción y sólo citar un poco de contenido sobre algo que desconoces.
La proporción recomendada es en un 80% de texto propio y un 20% de texto citado.
Determinar si la información corresponde a tu sistema masónico
Parte de la labor de “curado” que se debe hacer antes de utilizar una información u otra es detectar a qué sistema masónico pertenece. La mayoría de los datos que obtenemos en internet son una mezcla entre los diferentes sistemas y esto puede acarrear imprecisiones al momento de hacer el análisis, sobre todo en cuanto al significado de símbolos.
Por ejemplo, en el sistema del Antiguo Gremio masónico, no se cuenta con cámara de reflexiones, en su lugar existe una “cámara de preparación” misma que sirve únicamente para que el candidato se coloque en debida forma para ingresar propiamente al templo. Esta cámara carece de simbolismo masónico como sí lo tiene la cámara a la que estamos acostumbrados la mayoría de los masones de América Latina.
No le temas a otros rituales
Para poder realizar una Plancha o Burilado de calidad también es importante aprender a discriminar entre los sistemas masónicos, pero esto no quiere decir que uno sea mejor que otro o que alguno no sea utilizable.
Entonces, si la información que obtenemos pertenece al sistema del Antiguo Gremio o a otros sistemas que carecen de cámara de reflexiones y lo estamos usando para un trabajo con esa temática, no hace falta ser un experto para detectar que el trabajo no tendrá ni pies ni cabeza.
La recomendación, de nuevo, pasa por el tema de la lectura a consciencia. Por otro lado, si la información nos resulta valiosa, no hay nada malo en utilizarla, pero a manera de comparación. Justo como lo acabamos de hacer, explicando que existen distintas formas de preparar a un candidato dependiendo del sistema que se utilice. Esto, en la mayoría de los casos da un toque extra y un gran valor al trabajo realizado.
Importante: En algunas jurisdicciones y logias, el uso de otros rituales para la elaboración de trabajos comparativos está mal vista. Esto pasa por una visión retrógrada de la masonería, nada más alejado del espíritu del libre pensamiento que debe reinar en nuestros templos.
A pesar de esto, te recomendamos que realices estos estudios comparativos aunque no se te permita presentarlos en la logia. Esto te dará una visión amplia sobre la masonería. Así, cuando seas maestro y puedas tomar decisiones, no limites a los hermanos que gusten de hacer esos trabajos.
Si no comprendes un dato pide ayuda
No hay nada de malo en solicitar ayuda a los hermanos sobre un tema que no comprendas. Lo que está mal es esperar que alguien haga el trabajo por ti. Es importante que comprendas la diferencia entre pedir un consejo o ayuda sobre un tema y esperar a que ellos hagan todo por ti. Desde la selección del tema, las fuentes y el rumbo que se le busque dar a un trabajo, son TU RESPONSABILIDAD. Los hermanos pueden orientarte respecto de esto, pero la tarea de elegir es únicamente tuya.
De nada sirve que un hermano que ya hizo el trabajo, lo vuelva a hacer; con esto queremos decir, que si un maestro masón te hace el trabajo en la mayoría de sus aspectos, te elige el tema o te da los libros que necesitas, ¿entonces dónde está el trabajo?
¡No te pierdas nuestro artículo! ¿Cómo ser un buen masón?
¿Qué hacer si la información no es de tu grado?
La mayoría de la información que tenemos disponible en línea tiene la característica de ser mixta. Muchas fuentes sobre masonería dan por hecho que los lectores son en su mayoría maestros masones. Sin embargo, a menudo encontramos información que no corresponde ni siquiera al grado de maestro sino a otros grados accesorios o secundarios. Si somos aprendices esto se complica más.
La recomendación para evitar esto, es escoger el tema correctamente y buscar únicamente lo que necesitamos sobre el tema en cuestión. Además, vale la pena señalar que no pasa nada por leer algo que no te corresponde todavía, quizá sólo te estés arruinando “la sorpresa”. Mientras no expongas el tema con referencias de otros grados en la logia, todo está en orden.
De cualquier manera, si encuentras contenidos que no corresponden al grado que ostentas o al que pretendes presentar tu trabajo, lo mejor es que omitas esa información y la reserves para otro momento. También de esto se trata aprender a “curar” el contenido.
Consejos para la redacción
Cuando comenzamos a redactar nuestros trabajos no sabemos cómo darle un sentido lógico y eso es muy común. Lo que te recomendamos es que tengas una estructura base como referencia.
Recomendamos que un trabajo tenga estas partes como mínimo:
Introducción: Aquí explicarás una pequeña aproximación al tema y presentarás lo que podemos esperar de tu trabajo.
Desarrollo: Aquí expondrás toda la información sobre el tema; te sugerimos subdividir este apartado en la cantidad de subtítulos que sean necesarios para exponer tu tema.
Conclusiones: En esta parte expondrás los resultados de tu investigación, tus puntos de vista, dirás si comprendiste o no el tema; y sobre todo, expondrás el aprendizaje que obtuviste al realizarlo.
Referencias: Finalmente deberás compartir de dónde obtuviste la información y por qué elegiste esas fuentes de referencia.
Además de estos apartados, es importante que consideres estos aspectos para realizar un trabajo de calidad:
Extensión: Se refiere a la cantidad de páginas que tiene tu trabajo. Lo recomendado es no exceder las 3 cuartillas para no hacerlo pesado.
Duración: Es el tiempo promedio que tardarás en dar lectura a tu trabajo. Cuando realices la lectura preliminar en tu casa, es importante que tomes el tiempo. Una duración óptima es inferior a 5 minutos
Comprensión: Se refiere a la forma en la que se trasmite la idea. Normalmente un texto es comprensible para cualquier escucha, pero si se trata de un aspecto extremadamente técnico, este podría no ser tan fácil de comprender para tus hermanos. SI es el caso, ajusta el lenguaje que usas.
Saber separar y dividir el tema en varias presentaciones
Un consejo muy valioso es el de saber separar o dividir los temas en dos o más planchas masónicas para exponer en diferentes días de logia. Esta es una práctica recomendada para temas que son extensos y que requieren de una comprensión más compleja. Sin embargo, la división de temas únicamente se debe realizar si detectaste que el tema gustó y mantuvo la atención de los demás, no sólo porque lo quieras leer.
Esto es importante, la autocrítica es un aspecto elemental al momento de realizar trabajos masónicos. Muchos hermanos pierden de vista este asunto y llevan 4 trabajos consecutivos sobre un tema sólo porque un par de hermanos dijeron que era un buen trabajo (muchas veces por respeto).
Lo mejor es que prestes atención a tu audiencia y sobre eso decidas si vale la pena continuar en otra sesión o si será mejor elegir otra temática más digerible para otra oportunidad.
¿Cómo leer un trabajo en logia?
La parte final en la elaboración de trabajos masónicos siempre es la lectura de los trabajos. Este apartado pasa por una cuestión de preparación del expositor y claro, por los nervios. No todos los hermanos tienen la facilidad de pararse a hablar en público, de hecho, la primera vez que leas un trabajo en la tribuna de una logia masónica, puede resultar intimidante.
Existen muchas formas de exponer un trabajo, aunque lo más usual es que se realice en forma de conferencia. A pesar de esto, algunos hermanos gustan de exponer sus trabajos a manera de poema, cuento, historia, narración, etc.
Consejos para mejorar la lectura de tus planchas masónicas
Hay muchas formas de mejorar la lectura de los trabajos en logia. Sin embargo te damos algunas recomendaciones para que tus planchas, realizadas con tanto esfuerzo, no se vean empañadas por una lectura deficiente.
Ensaya tu trabajo en la comodidad y privacidad de tu casa.
Modifica las partes que te cuesten trabajo leer.
Sustituye palabras complicadas por sinónimos más simples.
Reduce la duración del trabajo.
Un trabajo extenso no es sinónimo de bueno.
Comprende lo que estás leyendo.
Comunica de manera clara tus ideas.
Consideraciones Finales sobre las planchas masónicas
Las planchas masónicas son una de las formas más didácticas para plasmar y compartir el contenido que hemos ido aprendiendo dentro de nuestro recorrido en esta carrera masónica. La elaboración de estos trabajos escritos y su correcta lectura son elementales para aprender los contenidos que tiene para ofrecernos la orden.
Si quieres aprender masonería de manera adecuada, es muy importante que te tomes el tiempo de leer, redactar y compartir los trabajos tu mismo. El plagio y la ley del menor esfuerzo sólo entorpecerán tu progreso y aprendizaje.