DIALOGO CON LA LUNA Creerá la luna que me conoce solo porque me ha visto contemplarla al caer la noche oscura? ¿Solo porque escuchó mis voces, porque me oyó cantarla, porque me vio buscarla, y me descubrió al mirarla con infinita ternura?.
¿Qué pensará de mí esa luna que me espera como yo la espero en nuestra nocturna y secreta cita? ¿Creerá conocer cuando mi corazón palpita, cuando suspira por un te quiero?.
¿Qué pensará esa luna que habita en el espacio de mi vigilia, en el cristal de mi ventana pegada, en mis noches, en mis días, en el algodón de mi almohada?
¿Pensará quizá que me conoce a mí como no me conoce nadie más? ¿Pensará, puede que sí, que quizá me entiende como nadie me entenderá jamás? Esa luna ¿Qué pretende?.
Solo porque me haya observado cómodamente asentada en el cielo, ¿Qué sabrá de mí si nunca ha llorado, si no ha estado enamorada, si nunca necesitó consuelo, si nunca la han abandonado? La luna no sabe nada.
Si la luna solo me mira distante, como se mira a una desconocida, si quizá no fuera mi amiga y me mirara como a cualquiera... Si quizá ni un solo instante de este tiempo en que nos creímos unidas me haya comprendido siquiera...
¿Qué pretenderá esta luna presumida? ¿También querrá ella que la quieran? Pues quizás, a fin de cuentas no seamos tan diferentes...
Dime luna altanera, dime luna que creces los sueños de tantas gentes y los míos, tantas veces... ¿Los tuyos, de qué se alimentan? Cuando me alejo de mi ventana ¿Dónde vas cada mañana en tu vagar por el espacio a tientas?.
Si sabes de mis sentimientos, si lees todos mis pensamientos si te he abierto mi corazón... Pensarás que me conoces, luna... Y tendrás toda la razón. Noemi Desconozco el autor |