BULBO DE PROA
Jonathan Soto me consulta lo siguiente: “¿Por qué los barcos grandes tienen una pelota en la parte delantera, por debajo?”
Ese aditamento estructural tiene el nombre técnico de “bulbo de proa”.
Se le añade sobre todo a los barcos de gran tamaño, que además deben moverse rápidamente.
Cuando una embarcación “corta” el agua con la parte delantera o proa (si esa no tiene el bulbo), crea unas ondas que, vistas desde arriba, es como si las viéramos como una “V” (imagine usted que el barco se ubica con la punta o proa hacia abajo, metida dentro de la V). Esas ondas en forma de “V” se va cerrando en torno al casco del los barcos, y eso es como estarlos “frotando”, es decir, crean resistencia al avance. En barcos pequeños, esa resistencia es perfectamente despreciable, porque el recorrido de cada onda a través del casco es muy pequeño.
Pero en los grandes buques, cada onda recorre varias decenas, incluso cientos de metros a cada lado del casco, y en ese caso la resistencia sí que no puede ser ignorada. Y representan un gasto mayor de combustible, y una ralentización de la velocidad. Pero se puede contrarrestar su efecto ralentizador gracias, precisamente, al bulbo de proa.
El bulbo crea un segundo patrón, muy diferente, de ondas. Su forma redondeada hace que las ondas que surjan sean más “anchas”, de modo que más que una “V” forman algo así como una “U”, pero con las “patitas” mucho más abiertas que la “V” misma.
Además, crea ondas un poco delante de la proa misma. La idea es ambos patrones se crucen justo en la proa, de modo que las crestas de uno coincidan con los valles del otro, anulándose mutuamente.
De hecho, si uno ve fotos de esos barcos moviéndose, notará que casi no hay ondas en sus lados.
Gracias al bulbo de proa, esos barcos pueden moverse más rápido, y con mayor economía de combustible.