BOLÍGRAFO GRINGO VS. LÁPIZ RUSO
Circula en la red Internet, desde hace bastante tiempo, una historia (que varios lectores me han preguntado cuán cierta es) que cuenta, palabras más, palabras menos, lo siguiente:
Cuando comenzó la carrera espacial, tanto soviéticos estadounidenses descubrieron que los bolígrafos convencionales no funcionaban por la falta de gravedad. Entonces, la NASA invirtió millones de dólares para diseñar un bolígrafo que fuera capaz de hacer su tarea en el vacío y en micro gravedad. ¿La solución que encontraron los soviéticos? Usaron lápices.
¿Es cierto ese cuento?
La respuesta es no. Y por varias razones.
La primera es que un bolígrafo convencional puede funcionar en el espacio, a condición de que la presión de la atmósfera interna de la nave sea lo suficientemente fuerte. De hecho funcionan mejor que en la superficie terrestre, porque un bolígrafo, puesto a escribir con la punta para arriba, terminará por no poder escribir. Para comprender por qué sucede eso, primero hay que explicar el verdadero funcionamiento de los bolígrafos.
La idea que la mayoría de la gente tiene es que los bolígrafos funcionan por gravedad (como sí lo hacen, por ejemplo, las plumafuentes). Por decirlo así, que el peso de la tinta es lo que hace que tome contacto con la pequeña pelotita de la punta, la cual se impregna y por ello traslada la tina al papel. Pero esto no es así: lo que funciona aquí es el principio de la capilaridad, que en esencia es la presión que ejerce el aire por el lado posterior de la columna, que la empuja poco a poco porque con cada giro de la pelotita se crea un diminuto vacío en el espacio que queda luego de que esa bola quita esa porción de tinta. Para compensar ese vacío es que la presión del aire hace que la columna de tinta lo rellene. Pero si ponemos el bolígrafo hacia arriba, la fuerza de gravedad es más fuerte que la de capilaridad, y entonces llega el momento en que la pelotita pierde contacto con la tinta.
Sobre las otras razones por las cuales esta historia es una leyenda urbana, nos referiremos mañana.