Un perro bien desparasitado, al que se le bañe regularmente, tendría la piel limpia de las mismas, y aún en caso de que adquiriera algunas, al bañársele se le detectaría
Viernes 31 de Mayo del 2013
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Por: Ronny Ugarte Quirós.
Laura Gómez me solicita que me refiera a la erliquia, enfermedad canina potencialmente mortal para ellos.
Debo comenzar con una reflexión: a casi todas las personas les agrada la idea de tener una mascota, pero no todas las personas están preparadas para tener una.
Les cuento esta historia (verídica): una señora llegó con su perro convulsionando, con hemorragias, problemas respiratorios, mucosas pálidas, mucho dolor y total falta de ánimo. Se conmocionó cuando la veterinaria le comunicó que el pobre perro tenía la etapa avanzada de erliquiosis canina, conocida también como erliquia, y que lo único que podía hacer por el animal era aplicarle la eutanasia para que no continuara sufriendo. En lugar de pensar en su mascota doliente, la señora pensó en su propio egoísmo y que no quería perderla, y simplemente se la llevó. Es fácil adivinar el destino de ese pobre can: posiblemente quiso llevarlo a otro veterinario, que si fue honesto, le dijo lo mismo. Y si la señora siguió con su actitud, el resultado final fue que el perro murió en medio de un sufrimiento atroz… cuando pudo ser evitado.
Y lo peor es que pudo ser evitado del todo, sin necesidad de sacrificar ese perro. Este hecho sucedió hace pocas semanas, pero para que la erliquia llegara a ese nivel, fue preciso que esa señora llevara al perro ya en el último momento, cuando la enfermedad es totalmente prevenible (o sea, un perro bien cuidado debería correr un riesgo alguno de contraerla), y aunque la contrajera, si se le hubiera llevado con las primeras manifestaciones hubiera tenido cura. O sea, que en manos de una dueña consciente, ese perro estaría vivo.
Sucede que la erliquia es transmitida por garrapatas. Por lo tanto, un perro bien desparasitado, al que se le bañe regularmente, tendría la piel limpia de las mismas, y aún en caso de que adquiriera algunas, al bañársele se le detectaría, en cuyo caso lo prudente sería ir de inmediato al veterinario. Además, se venden infinidad de productos baratos para prevenir que al animal se le peguen pulgas y otros bichos.
Pero aunque no se detectaran las garrapatas a tiempo, bastaría con ver un cambio de ánimo y decoloración en las mucosas del animal (como con cualquier enfermedad) para que un dueño consciente fuera de inmediato al veterinario.
La gente suele adquirir mascotas sin tener en cuenta que no sólo son compañía, sino también seres vivos que requieren cuidados y que pueden enfermarse, aparte de que necesitan estar bien alimentados y tener un buen refugio. Si usted no es capaz de comprender eso… mejor ni intente convivir con un animal que dependerá de usted en todo.