El canon bíblico (instauración)
Viernes 17 de Mayo del 2013
Por: Ronny Ugarte Quirós.
Alexander Ramírez me consulta lo siguiente: ¿Cómo se decidió qué libros pertenecieran a la Biblia?
El canon bíblico que conocemos fue instaurado en el Concilio de Trento, que se dio de 1545 a 1563. Dicho canon incluyó un total de 73 libros, entre el Antiguo y el Nuevo Testamento.
No fueron incluidos libros que, a pesar de hacer referencia a temas de doctrina o a la vida de Jesús, no calificaron en cuanto a ser reconocidos como de inspiración divina.
Entre esos libros excluidos se encuentran los así llamados “evangelios apócrifos”, que son varios y relatan cosas como la muerte de José, hechos milagrosos en la infancia de Jesús, etc. Este material puede encontrarse en Internet. Estos libros nunca fueron considerados de inspiración divina y por tanto su no inclusión dentro del canon era inevitable.
Del canon establecido en Trento, muchos protestantes no consideran parte real de la Biblia a siete de los libros, conocidos como Deuterocanónicos (que significa algo así como “de segunda categoría canónica), que son Tobit, Judit, Sabiduría, Eclesiástico, Baruc, 1ª y 2ª de Macabeos, además de adiciones a otros libros, como Daniel 3. 24-90 y los capítulos 13 y 14, y algunas al libro de Esther.
Entre las razones que aducen para no reconocerlos están el hecho de que todos fueron escritos después del tiempo en que los hebreos dicen que dejaron de haber profetas. Además todos fueron escritos en griego, no en hebreo, como sucede con el resto del Antiguo Testamento, y algunos de sus pasajes se prestan para la controversia doctrinal.
En defensa de su inclusión se argumenta que los siete libros fueron incluidos en una traducción al griego de las escrituras que hicieron 70 sabios (por eso se le llama septuaginta), traducción que constituye el canon más antiguo conocido del Antiguo Testamento.