MEXICO
(Con manos de amor
sobre tu geografia)
I
Paso mis manos con amor y toco
con dedos como labios
tu palpitante, esplendorosa
y deslumbrante goegrafia.
Paso mis manos con amor y toco
con dedos como besos
el color de tu piel morena de maizales,
las venas rumorosas de tus rios,
los lunares de oro tus altos volcanes ,
y los albos lunares de tus altos nevados,
los lagos con que enjoyas de cristal tu hermosura,
los largos litorales que rodean, marinos
tu perfil generoso,
los vegetales pliegues de tu vestido forestal
y, en fin tu carne de querida tierra
y el pulso de tu sangre.
II
Paso mis manos con amor y toco
con dedos como ardientes gulas de tus paisajes,
los enclaustrados rios de Yucatan
con su voto perpetuo de renuncias solares,
el agua monacal de los cenotes,
los alados pinceles con que las mariposas
dibujan sus jardines en el aire,
el puente vivo y libre del salto del venado
y el floridoflorero de plumas del faisan.
III
En la costa, Campeche me brinda generoso
un cesto marisquero,
oloroso de yodo, recalado y jugoso de salitre y mareas;
y en sus bosquesme entrega
el tarro de perfumes tiernos y carpinteros
de sus finas maderas.
IV
Gozo en Quintana Roo la fiesta de la boda
de la luz con el mar:
carnavales de agua, barquillas de arco iris,
resplandores cautivos,
claridades ancladas, fulgores encallados
en arenas de nieve,
mientras bajo las aguas los peces iluminan
su viva, marinera y gentil floreria;
y, sobre el manso y puro cristal del oleaje,
relumbra una gloriosa singladura de sol.
V
Paso mis manos con amor y toco
con dedos como vivas caricias de joyero
arboreo y rumoroso,
las luminosas, generosas,
grandiosas, vegetales
esmeraldas de Chiapas y Oaxaca
en las que Dios, seguramente,
se tomara sus vacaciones verdes
como un descanso de su gloria blanca.
VI
Paso mis manos con amor toco
los llanos , rumorosos desiertos de Chihuahua
con sus claras estrellas tan cegadoramente
colgadas al alcance de la mano;
en Coahuila me encuentro,
junto al bronco crujir de lapalbra,
la delicada, blanca y tierna
anunciacion del algodon;
y Zacatecas deja entre mis dedos
un aire corneado de rumores taurinos,
un saludo de plata
y el verso de oro de la "Suave Patria".
VII
Acaricio tu brazo
espartano de Baja California,
tatuado de vides y de cactus;
brazo que desde el hombro de Tijuana
se agita entre oleajes de virgenes mareas,
de espumas no manchadas, de arenas no pisadas,
de escondidos e intactos paraisos de sol
y termina en un dedo, apostol de los cabos,
San Lucas marinero, hermanador de mares.
Y que bien llevas bajo tu brazo un mar
como un inmenso y verde pergamino marino
donde anida serena
la paloma bermeja de La Paz;
y al que se asoman Sinaloa y Sonora
como almirantes con amor de tierra
o ganaderos con pasion de mar.
VIII
Quien que ama de veras no llevaria a su amada
como el mejor regalo,
las pulseras-bahias de Acapulco,
la medalla de plata y flor de Taxco,
o el jarocho collar de luz de Veracruz?
IX
Por San Luis Potosi, Pacifico guerrero,
llevas para una guerra de dulzura
las granadas de mano de sus tunas:
y por Aguascalientes
verde Gabriel anunciador de vides,
alientas con temblorde toreria
sabor a soleares de Triana.
X
Por quebradas y cerros y barrancas
camina el indio
cargado de silencios milenarios,
hecho de soledades y maiz resignado.
por milpas y por valles
trabaja el indio,
ayer, alto en piramides,
domador de obsidianas,
poeta de volcanes y de rios;
hoy, paciente artesano,
abeja de la arcilla y la madera,
sabia mano textil para el rebozo,
comendador rural de la tortilla.
indio que cree en Dios, pero mas en la Virgen
que en su rostro engrandece la morena color;
ese indio que un dia, llamandose Juan Diego,
gozo del milagroso privilegio
de mirarse en los ojos de su madre morena,
mientras llenaba el aire
de un perfume de frescas rosas guadalupanas.
primera parte